La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Tres premios en siete meses

La lotera Virginia Castellano, del barrio de Schamann, reparte 120.000 euros en el juego del Joker en lo que va de año

Virginia, junto a su marido, Armiche Quevedo, y la pequeña Ainaria, ayer. LP / DLP

Virginia Castellano Santana, propietaria de la administración de lotería, número 28, en el barrio de Schamann, no salía ayer de su asombro. Por tercera vez en lo que va de año era bendecida por la suerte, gracias al Joker, un tipo de apuestas que funciona en combinación con la Primitiva por tan solo un euro más. El jueves repartió 10.000 euros, un premio de tercera categoría al coincidir las últimas cinco cifras con el número ganador -2972819-. Fue la misma cantidad que dio el pasado mes de mayo. En febrero, el premio fue mayor, ya que la fortuna dejó 100.000 euros al caer uno de segunda categoría.

Casualmente, la administración, situado en Pedro Infinito, número 168, repartió también ayer un premio de 1.260 euros en la Primitiva y, otro de la Bonoloto, de 726 euros.

La joven propietaria de La Bola de Cristal, como así se llama el establecimiento en honor a una esfera que tiene de amuleto en su local tras embarcarse en el sector de las apuestas y lotería del Estado, estaba ayer eufórica de alegría porque el premio vuelve a quedarse en casa. En el barrio de Schamann, donde asegura Virginia "hay mucho obrero de la construcción en paro y gente necesitada" al que no le viene mal una lluvia de euros.

El agraciado no había aparecido aún por el establecimiento, pero Virginia estaba convencida de que era un cliente habitual ya que se trata de un tipo de apuesta muy poco conocida y son poco los que prueban a la suerte. "El agraciado no lo habrá mirado todavía", comentaba ya cerca del mediodía

Clientes con dificultades

La joven, de 29 años, explicaba que el premio que repartió en mayo le cayó a un joven de la construcción que estaba en paro y, que el de febrero, fue a parar a manos de un jubilado al que le vino como agua de mayo el dinero ya que sirvió para un nieto con problemas de salud. En apenas siete meses vuelve a repartir alegría a uno de sus clientes.

Virginia, casada y madre de la pequeña Ainaria, regenta la administración de lotería desde hace dos años y, hasta el momento, cree haber repartido "más de 2 millones de euros" entre la lotería y apuestas entre los diversos juegos que la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado pone en marcha cada día de la semana.

En el caso del Joker, se puede apostar los jueves y los sábados con la Primitiva con un premio de máxima categoría de un millón de euros.

"Estoy bastante contenta. No es mucho dinero pero es el tercero que doy este año en el mismo juego", confesaba Virginia. Y no solo por haber trasmitido la felicidad a uno de sus clientes sino porque, a pesar de las dificultades para abrir la administración de lotería, su esfuerzo comienza a verse recompensado con tanto premio.

"Estas cosas [repartir premios] ayudan a tener más clientes en la administración y a recompensar el esfuerzo que he realizado. Me metí en este negocio en 2012, era muy jovencita y ningún banco me quería dar un crédito. Tuve que embarcar a mi familia e hipotecarme cuando una sucursal de Maspalomas aceptó darme el dinero", rememoraba Virginia, li-cenciada en Derecho, pero que optó por abrir una administra-ción de lotería tras pasar un tiempo durante la carrera trabajando en un banco y ver que los empresarios que más dinero ingresaban eran los que tenían una administración de lotería.

El jueves no hubo ningún agraciado de primera categoría en el Joker, aunque hay una nueva oportunidad este sábado con la Primitiva, que tiene un bote de 70.500. 000 euros.

Compartir el artículo

stats