¿Cómo resumiría lo que ha expuesto a nivel personal en la mesa redonda?
La idea era que contáramos nuestras experiencias, porque al final somos un ejemplo donde se miran los demás. Canarias es un destino turístico de nivel mundial y ellos también quieren serlo. En ese sentido, este es el reto de Canarias, liderar y ayudar este tipo de proyectos.
¿Tiene potencial Cabo Verde?
Yo creo que sí, como cualquier isla. Tiene sus limitaciones, claro, pero poco a poco lo irán consiguiendo. Es un eje estratégico para ellos y el turismo es una gran herramienta de desarrollo, como hemos comprobado en Canarias. Un país que tenga potencial turístico es necesario que lo utilice, porque le va a ayudar. Para nosotros, ahora mismo, el turismo es parte de nuestra economía, pero no tiene por qué ser la más importante. Una vez te desarrollas, vas subiendo ligas: de Segunda a Primera y de Primera a la Champions. Ellos están subiendo todavía y han venido aquí a ver cómo lo hemos hecho nosotros. La idea no es ir a darles clases, sino contarles lo que hemos hecho nosotros y que ellos decidan una cosa u otra.
¿En qué aspectos considera que el Archipiélago puede ser un ejemplo?
Somos un destino turístico de primer orden, y en náutica también. Somos lo más cercano que ellos tienen, y yo creo que es lógico que se fijen en nosotros. En concreto, para desarrollar la náutica deben fijarse en cómo nosotros hemos protegido el litoral; tenemos muy poco impacto para la actividad que tenemos. Hay que destacar nuestra sostenibilidad; yo siempre pongo el ejemplo de Maspalomas, que estamos discutiendo el Plan General, pero el hecho de que se hiciera Playa del Inglés y no se tocaran las dunas es novedoso, y fue hace 40 años o más. En general, nuestras costas están muy protegidas, y creo que en ese sentido somos ejemplares; tener 100.000 camas en unas Islas como las nuestras, tan pequeñas, y tener 13 millones de turistas, con una costa tan protegida... Tenemos mucha actividad turística y eso que en nuestra costa hemos actuado poquito; utilizamos el mar muy eficientemente. Yo creo que somos un ejemplo mundial.
¿A qué experiencias se refería al principio?
Pusimos en marcha un proyecto que tenía que ver con Marruecos hace unos años. Con la zona de Agadir llegamos, incluso, a montar productos turísticos; con la participación de Binter, por ejemplo, puedes volar de Gran Canaria a Agadir y allí coges un barco a Lanzarote para hacer la travesía. O sea, productos turísticos asociados a la náutica.
¿De alguna manera colaborarían con el desarrollo de la náutica en Cabo Verde?
En mi intervención quise destacar sobre todo la idea de que nosotros tenemos que desarrollar la marca del Atlántico. Igual que otros destinos tienen sus playas, el destino Atlántico deberíamos hacerlo como marca en su conjunto. Un ejemplo es que la gente viene desde la Península hasta Canarias y no para en ningún sitio: ni se le ocurre parar en Madeira ni en la costa africana... Eso también te resta gente. Si fuera fácil llegar, habría más posibilidades; a lo mejor la gente vendría bajando poco a poco de forma segura y parando en más puertos. Es bueno que seamos un destino Atlántico, al que sea fácil llegar; y nosotros no estamos en el principio, sino en el medio, y es positivo que los de más arriba se vayan desarrollando, entre otras cosas sus herramientas de seguridad, de confianza por parte del cliente... Aumentaría nuestro potencial si ayudamos a los demás. En el imaginario de todos los navegantes, que es a lo que hay que apelar cuando haces marketing, está el Océano Atlántico. Y a alguien que le apetezca venir puede hacer una pequeña prueba y, a lo mejor, le da por ir de Madeira a Lanzarote; y así se enfrentarían al Atlántico. Es verdad que nosotros lo podemos desarrollar dentro de nuestro propio Archipiélago, pero la idea de ayudar a los demás es buena, porque esa marca Atlántico implicaría también otros destinos variopintos y exóticos como Marruecos o Cabo Verde. Darían más ganas de navegar por el Atlántico a más de uno.
De cara al futuro, ¿cree que se está en el camino de conseguir la creación definitiva de esa marca de la que habla?
Yo creo que el gran reto que tenemos es ese. Si no lo conseguimos, tendremos problemas. El reto es que se nos reconozca como un destino que tiene conocimiento también asociado. Ese es el reto que tenemos como canarios de segunda generación, ya que nosotros no estamos ya en el desarrollismo; tenemos otras capacidades, y tenemos que ser capaces de exportar ese conocimiento, ya sea turístico o, como en este caso, náutico.
