La revisión del valor catastral que ha solicitado el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria eleva en 1.040 euros el Impuesto de Sucesiones, es decir, los pagos que han de realizar los hijos al heredar una propiedad. Así lo ha calculado el Partido Popular (PP), tomando como base una vivienda con un antiguo valor catastral de 60.000 euros. "El catastrazo que aplicará el alcalde Hidalgo en los recibos del IBI en 2016, tras su solicitud de revisión del mismo, supondrán un incremento notable de algunos tributos que oscilarán, dependiendo de los casos, entre los 15 euros y los 1.800 euros", señaló ayer el portavoz popular Juan José Cardona en una nota.
El regidor capitalino, Augusto Hidalgo, pidió por escrito el 30 de julio pasado al Catastro la actualización del valor de las fincas de la capital grancanaria, acogiéndose a la opción que da cada año el Ministerio de Hacienda a las corporaciones locales para llevar a cabo esta medida. Esta decisión voluntaria se tomó, según palabras del socialista, para evitar la pérdida de siete millones de recaudación, ya que expiraba la obligatoriedad estatal de subir un 10% el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Como bajaba el IBI un 10%, el tripartito decidió solicitar el incremento del valor catastral, que coincide que es un 10% al alza, aunque esto no se comunicó a los ciudadanos. De esta manera, los recibos de 2016 serán iguales que los de 2015.
La Ley del Catastro no obliga a los gobiernos locales a acogerse a esta medida, que recoge el artículo 32.2. Habla de "previa solicitud" de la corporación, como así sucedió en julio pasado. Tampoco el artículo 28 del Real Decreto 1/2004, del 5 de marzo, de la Ley de Catastro Inmobiliario expresa obligatoriedad. Se refiere a la revisión de toda la ponencia catastral y habla de que no se puede realizar si no han pasado cinco años desde la última actualización y "en todo caso" que se haga "a partir de los diez años" desde la anterior, que, en el caso de Las Palmas de Gran Canaria, fue en 1996.
En el ejemplo que ha elaborado el Partido Popular, con una vivienda que estuviera valorada en 60.000 euros, hay otros impuestos que se ven afectados, tanto en la fiscalidad municipal como en la estatal y la autonómica. En relación al propio IBI, el PP estima que, al aplicar el tipo actual, es decir, un 0,73%, el incremento del recibo sería de 44,22 euros. Sin embargo, esta subida queda neutralizada por el hecho de que el Estado ya no impone una subida del 10% a los ayuntamientos. Por tanto, los ciudadanos pagarán la misma contribución que en 2015.
En cuanto a la plusvalía, en este tributo que se aplica cuando se hace una venta, adjudicación, donación o herencia, tomando la referencia de la misma vivienda y suponiendo que el valor catastral del terreno es de 20.000 euros y que lleva 15 años en posesión de su último titular, habría que pagar 270 euros más. En cuanto a fiscalidad estatal, en el IRPF, imputado por segunda vivienda no destinada a actividad empresarial o al arrendamiento, se pagarían alrededor de 13,2 euros, aplicando un 20%. En el impuesto sobre el Patrimonio, siempre usando el mismo ejemplo, serían 90 euros más.
Con respecto a la fiscalidad autonómica, por el Impuesto de Transmisiones serían entre 90 euros y 780 euros más; en el de Sucesiones, como se ha dicho, serían 1.040 euros, aplicando un 12% de gravamen; y en el Donaciones se llegaría a un incremento de 1.800 euros. Cardona cree que Hidalgo busca "incrementar los ingresos del Ayuntamiento a costa de los propios vecinos".
