La red de saneamiento y abasto de aguas y el derrumbe de muros y laderas acaparan buena parte de los daños que provocaron las lluvias torrenciales de la pasada semana en la capital grancanaria. El arreglo requerirá una inversión cercana a los siete millones de euros. Por el momento, el Ayuntamiento ha presentado un informe provisional de daños, para acogerse a las ayudas del Estado, de 5,24 millones de euros, pero la concejala de Presidencia y Seguridad, Encarna Galván, advirtió ayer que todavía están pendientes de valoración otros destrozos muy cuantiosos como los que afectan a la carretera y los accesos peatonales de El Confital; el puente de acceso a las piscinas de La Laja y las escaleras que conducen a la playa; los dos balnearios de Las Canteras y la playa de Bocabarranco, entre otros.
Encarna Galván, destacó que este primer balance es provisional, porque en los próximos días pueden detectarse otros daños causados por las lluvias. "Se tardará unos días todavía", avisó, "en tener una valoración económica más precisa". De hecho, añadió, el Plan de Emergencias seguirá activo unos días más, para tener las efectivos preparados, ante el riesgo de derrumbes.
En el balance de obras destacan las infraestructuras relacionadas con la red de saneamiento, depuración y abasto de aguas, que precisan una inversión mínima 2,5 millones, según la primera valoración realizada, para reparar los desperfectos ocasionados y evitar nuevas inundaciones en la ciudad.
Entre las obras necesarias destaca una actuación para garantizar el drenaje en el túnel de Julio Luengo que cuesta 100.000 euros. Durante las lluvias tuvo que cerrarse al tráfico en varias ocasiones por sufrir inundaciones en la boca que da a Alcaravaneras. Galván aseguró que el sistema de drenaje exterior de Julio Luengo figura entre las obras preventivas que los técnicos consideran necesarias y que no se han hecho. No obstante, señaló que en estos momentos es imposible saber si el anegamiento de los túneles se debió unicamente a la ausencia de este sistema de drenaje, que los técnicos consideran necesario. "Ha habido mucha desatención, porque son obras que no tienen una cuantía tan grande, que hayan impedido su realización", dijo Galván, que destacó que otra actuación preventiva de drenaje que hay que abordar es la de la zona de Martín Freire-barranco de El Lasso, que también sufrió graves inundaciones.
En cualquier caso, la edila aclaró que lo prioritario en estos momentos son las obras que garanticen la seguridad de las personas, como el arreglo de la ladera situada en la parte trasera de la urbanización Guaydil, en el Valle de Jinámar, cuyo mallado ha iniciado el Ayuntamiento con fondos propios.
Otras obras de saneamiento que hay que abordar son el depósito de tormentas de la Cícer, para evitar que el barranco de La Ballena destroce la playa cada vez que llueve, y el desvío de los colectores de la urbanización Reina Mercedes, valorado en 600.000 euros.
Las actuaciones relacionadas con el derrumbe de muros y laderas precisará de una inversión de más de 2,2 millones de euros, según los primeros cálculos. En este apartado destaca el arreglo del muro del Árbol Bonito, en la entrada a Vegueta por San Juan, que tendrá un coste de 375.000 euros. La estabilidad de la ladera de la urbanización Guaydil precisará de 100.000 euros y el arreglo del muro y la calle Álamo costará 560.000 euros. El muro de contención de San Juan precisa 780.000 euros.
Horas extras
Por su parte, las infraestructuras relacionadas con el alumbrado público han sufrido daños valorados en 9.400 euros y los parques y jardines han sufrido destrozos, tasados en 372.999 euros. La atención a las 28 personas desalojadas ha supuesto, por ahora, un gasto de 7.500 euros en la evacuación y realojo. La movilización de los recursos económicos y materiales movilizados para atender las sucesivas emergencias ha tenido un coste de 3.921 euros. Encarna Galván anunció que, de forma excepcional, se abonarán las horas extraordinarias efectuadas en las labores de limpieza y emergencia que desarrollaron entre el 20 y 25 de octubre. Galván calificó de "magnífica" la respuesta del personal municipal que participó en la tareas y consideró que "por las circunstancias excepcionales de la situación de alerta y ante la dedicación, implicación y la magnífica y encomiable labor realizada, consideramos que debemos recompensarles mediante el pago de horas extraordinarias", ya que normalmente se compensan con horas libres.
