La celebración de una Junta General para aprobar los presupuestos del Real Club Náutico de Gran Canaria para 2016 han vuelto a reavivar el enfrentamiento entre partidarios y detractores de la actual directiva. Ese órgano abordará mañana la propuesta del equipo que preside Óscar Bergasa. Las cuentas, en este caso las de años anteriores, ya han sido motivo de conflicto este mismo ejercicio.

El último episodio del enfrentamiento que se vive en el seno de la institución ha estado protagonizado por la difusión entre los socios de extractos bancarios que contienen gastos de viajes y estancias en hoteles de dirigentes de anteriores mandatos y de familiares directos. Esos documentos dan a entender que fueron cargados a la cuenta de la centenaria sociedad. Entre esos nombres figura el del anterior presidente, Juan Marrero Portugués.

Marrero asegura que la actual Junta Directiva ha vertido "injurias" contra él y sus colaboradores a través de un informe que fue enviado por carta a los socios de la entidad la pasada semana.

No obstante, los tiras y aflojas entre quienes apoyan la gestión de Óscar Bergasa y los que se muestran contrarios se remonta más atrás en el tiempo, prácticamente desde que este llegara a la presidencia hace dos años. Solo en el último mes, se ha producido un cruce de opiniones entre algunos asociados y el presidente a través de escritos que se han publicado en LA PROVINCIA / DLP.

El ambiente que se vive en el club también se ha visto enrarecido por el hecho de que hace unas semanas se diera a conocer la apertura de un expediente sancionador disciplinario a 34 socios que pueden ser expulsados de la entidad por haber firmado una denuncia en la que se acusaba de faltas graves a Óscar Bergasa y su equipo directivo. El incidente tiene su origen el pasado 16 de junio cuando 87 miembros de la entidad rubricaron un escrito que solicitaba una comisión especial para valorar si se habían cometido infracciones económicas por parte de la directiva. La petición se fundamentaba en un supuesto exceso de más del 10% de los gastos autorizados por el presupuesto anual.

Sin embargo, la entidad no dio por válidas las firmas por dos motivos. El primero es que una socia aseveró que la suya había sido falsificada. El segundo consiste en que la directiva consideró necesaria la presentación de una fotocopia del DNI o identificarse en las oficinas de las institución para tomar por válidas las rúbricas. De los 87 socios que inicialmente afirmaban que se había gastado por encima de lo permitido por los estatutos, tan solo 34 accedieron a presentar la documentación requerida. Ellos son a los que se expedientó a finales de septiembre al considerar que se había incurrido en una presunta incorrección punible al acusar a Bergasa y su equipo de irregularidades, ya que tras identificar a los firmantes, la entidad sobreseyó la reclamación.

En lo que a la liquidación de cuentas del año anterior se refiere, la gestión de Bergasa ganó por cuatro votos de diferencia. De este modo, en la Junta Económica del 22 de junio, fueron 135 los que apoyaron los presupuestos y 131 los que los rechazaron. Además de este respaldo de los socios, el presidente ha usado en su descargo que el exceso de gasto no autorizado del que se les acusaba "no fue avalado por el informe de los auditores".

Ahora, a punto de darse a conocer "una modificación presupuestaria de reducción del gasto", según se recoge en la web de la entidad, es Juan Marrero Portugués el que ha criticado en la situación económica del club mediante una carta que dirige a la Junta Directiva. A Bergasa y a su equipo es a quienes reprocha que hayan "liquidado el ejercicio del 2014 con más de 400.000 euros de déficit, cuando solo se les había autorizado 80.000" o, "que los 700.000 euros que tenían en caja cuando tomaron posesión se hayan esfumado".

El expresidente también les recrimina a los actuales dirigentes que "con una cara dura de mucho cuidado" se atrevan afirmar que por primera vez en la historia del club presentan un presupuesto organizado de acuerdo a criterios contables. "Y que eso lo diga una junta cuyo presidente, durante 12 años anteriores, estuvo dando el visto bueno en esa materia presupuestaria a las cuentas del club. Todas las juntas anteriores han presentado presupuestos adecuados", apostilló Marrero.