Las Palmas de Gran Canaria Puede en el Ayuntamiento capitalino se posiciona en contra de la instalación de la planta de biomasa que Ence Energía y Celulosa pretende levantar en el Puerto de La Luz y que sería la mayor de España. Así lo expuso ayer el concejal de Urbanismo del Consistorio, Javier Doreste, que asegura que la postura de su partido -Las Palmas de Gran Canaria Puede- "es que, dado que la planta supondrá un impacto visual considerable y que contaminará, no nos gusta y, por tanto, estamos en contra". En cualquier caso, el edil puntualizó que se trata de decisiones "que hay que tomar valorando más cuestiones, no según nuestro gusto particular".
En este sentido, Doreste explicó que el Ayuntamiento, que ya ha informado de que el Plan General de Ordenación Urbanística contempla la posibilidad de instalar esta planta, está a la espera de conocer un informe de impacto medioambiental que elabora el Gobierno de Canarias. "El informe, que nos han dicho que existe y que es favorable respecto a la construcción de la central, aún no nos ha llegado", aclaró.
"Nosotros solamente tenemos competencia a la hora de conceder la licencia, que es un acto reglado que no depende de la voluntad política. Por eso estamos a expensas de ver el informe, y queremos conocer también la opinión del Cabildo y de la Autoridad Portuaria, para saber si en los planes de desarrollo del Puerto como punto de interés turístico para cruceros de calidad tiene cabida una planta de este tipo", agregó el concejal, que igualmente explicó que su compañera la edila de Sostenibilidad y Limpieza del Consistorio de Las Palmas de Gran Canaria, Pilar Álvarez, ha mantenido reuniones con representantes de Ence con el fin de recabar información acerca de las instalaciones que la empresa ha solicitado levantar en La Luz.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Luis Ibarra, afirmó ayer que si el informe del Gobierno de Canarias es favorable, la Autoridad Portuaria concedería la licencia. Asimismo, explicó que "nosotros nos limitamos a que toda la solicitud se haga conforme a la legislación vigente y que pueda entrar dentro de los usos que estipula el plan general del Ayuntamiento. Nosotros hacemos puro trámite, no emitimos juicios de valor".
Por su parte, fuentes de la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria aseguran que el órgano no tiene aún una postura oficial acerca de este asunto, si bien reconocen que se trata de un proyecto que genera "bastantes dudas".
Ence solicitó hace más de un año 48.000 metros cuadrados en el Puerto de Las Palmas para levantar este complejo, diseñado para la producción de energía eléctrica a partir de residuos forestales o agrícolas, para generar hasta 70 megavatios al año. La zona del dique de La Esfinge es donde estaría ubicada esta planta.
Otra central en Arinaga
La multinacional pidió los primeros permisos al Gobierno de Canarias en mayo de 2014, para construir estas instalaciones en La Luz y otras de similar capacidad en Arinaga. La inversión en cada una de estas centrales supera los 100 millones de euros, y supondría un amplio movimiento de trabajadores del sector de la construcción entre los 20 y 24 meses que se estima que puedan durar las obras de cada planta.
Suponiendo que entren en funcionamiento, está previsto que se contrate, aproximadamente, a 50 empleados por central. La plantilla sería superior a la del complejo que Ence posee en Huelva, que está compuesto por 24 profesionales que se encargan de las operaciones y del mantenimiento de las instalaciones. Además, la central onubense genera unos 370 empleos indirectos, concentrados especialmente en las zonas de campo donde se recogen unas 150.000 toneladas de biomasa usadas para convertir los residuos en energía eléctrica.
