Los ewoks y los personajes de Frozen, Brave y Pinocho acogen a los más pequeños en la Casa de la Navidad que desde hace cinco años abre sus puertas en la calle Triana de la capital grancanaria. En esta edición, además de muchos de los personajes relacionados con la Navidad, se han querido incluir varias estancias dedicadas a los de otras películas, conformando un total de diez habitaciones. Entre ellas, una dedicada a los pequeños osos que aparecen en el sexto episodio de la saga Star Wars.

En cada estancia, una banda sonora hacia aún más envolvente el cuidado decorado. Y en esta no iba a ser menos, donde la música de John Williams sobrecogía a los niños a su entrada. Allí, un simpático arlequino explicaba a los chiquillos la importancia del medioambiente, un valor que se les ha intentado transmitir junto al de la solidaridad. Tanto es así, que el coste simbólico -dos euros- de la entrada a esta atracción se destina a programas asistenciales de diversas ONGs de la Isla. Asimismo, otra de las novedades de este año es que se ha intentado que los niños compartan con sus padres esta experiencia, haciéndolos también partícipes de las conversaciones entre los pequeños y los animadores de la Casa de la Navidad.

Tras superar la enorme cola de gente que se forma en la misma calle Triana, el recorrido por el interior dura unos 20 minutos. Después de pasar por el resto de estancias, con su característico estampado navideño o de alguna otra película como el Londres de Mary Poppins, los muchachos reciben un pequeño obsequio.

El personaje al que interpreta Patricia Santiago explica a los niños las normas a su llegada, les hace un recorrido por la siguiente habitación, dedicada a los minions, y les acompaña hasta la aldea de la Navidad. La época medieval y la casa de Papá Noël son algunas de las temáticas del resto de cuartos. Antes de entrar, además, los pequeños pueden también depositar en un buzón sus cartas a los Reyes Magos.

En horario de 11.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 21.00 horas se podrá visitar, hasta el próximo 5 de enero, la Casa de la Navidad, cuyos escenarios, que empezaron a elaborarse en octubre, se han realizado a partir de material reciclado y se han empleado pinturas y luces. Todo en pos de lograr un ambiente mágico en el que los niños pueden dar la bienvenida a la Navidad.