La capital grancanaria tendrá el próximo año un nuevo hotel emblemático en el parque Santa Catalina. La comisión municipal de Patrimonio acaba de autorizar la rehabilitación de tres edificios del parque y su cambio de uso para transformarlos en un hotel urbano. Los tres inmuebles, que tienen tres y cuatro plantas serán unidos en su interior para instalar un total de 21 habitaciones. Mientras la oferta alojativa sigue creciendo en la ciudad, el Gobierno municipal reclama al Gobierno canario y al Cabildo, junto a los empresarios turísticos, una promoción diferenciada de Las Palmas de Gran Canaria como destino urbano con personalidad propia. Por esta senda caminará la segunda fase del plan de marketing turístico de la ciudad, según anunció ayer el alcalde de la capital grancanaria, Augusto Hidalgo.
El empresario canario Luis Cabrera Suárez compró las tres casonas el pasado año y su objetivo es iniciar los trabajos de rehabilitación el próximo mes de enero para que el hotel esté listo para abrir sus puertas en enero de 2017, el año en que será inaugurado el Acuario Poema del Mar, a sólo unos metros del parque. El hotel, que será el segundo que se instala en esta plaza y el número once que se incorpora a la oferta alojativa de la ciudad en los últimos tres años, se llamará Acuario Las Palmas. Es precisamente el previsible aumento de turistas por la apertura del Acuario lo que ha llevado a Cabrera a meterse por primera vez en esta aventura turística, en la que cuenta con la ayuda del arquitecto Eduardo Sáenz, que se ha encargado de realizar los proyectos del nuevo alojamiento, que se integrará en el parque Santa Catalina y su actividad de ocio. De hecho, en las plantas bajas del hotel seguirán las terrazas de Lolita Pluma y una cafetería que se instalará próximamente. Se mantendrá también el local de juegos recreativos. El arquitecto garantizó que las fachadas de los edificios de principios del siglo pasado, que tienen protección ambiental, se mantendrán como hasta ahora y en el interior se hará "una intervención mínima para instalar las 21 habitaciones, que tendrán 26 metros cuadrados, cada una, y serán diáfanas".
"Queremos que sea un hotel que se integre en el parque y que aumente el valor de la zona. El parque va a ser la terraza que utilizarán los clientes del hotel", explicó Sáenz, quien alabó la predisposición del Gobierno municipal para agilizar los trámites y dar vía libre a este nuevo alojamiento. El arquitecto destacó el ruinosos estado en que estaban las casonas, de tres y cuatro plantas que habían sido invadidas por las palomas, debido al abandono en que se encontraban, tras dejar de vivir en ella sus antiguos moradores. Cabrera, cuya empresa se dedica a la rehabilitación de edificios, calificó de "regalo de Navidad" la autorización de Patrimonio. "Toda esta zona de Santa Catalina está creciendo desde hace algunos años y con la apertura del Acuario se va a potenciar mucho más".
El concejal de Turismo, Pedro Quevedo, consideró que la apertura de este hotel y de otro que está en marcha en la calle Ripoche, contribuyen a revalorizar el entorno del parque Santa Catalina, que calificó como "el salón" de la ciudad. Quevedo participó ayer junto al alcalde y el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT), Fernando Fraile, en una reunión para poner en marcha una estrategia conjunta que permita posicionar la capital como destino turístico singular. Ayuntamiento y empresarios coincidieron en reclamar una promoción de la capital como destino singular.
