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Sanidad emite un segundo informe negativo sobre la planta de biomasa

La Dirección General de Protección de la Naturaleza cuenta con otro estudio que redunda en los perjuicios ambientales que puede acarrear la instalación

Zona en la que se quiere instalar Ence, en el Puerto de La Luz. QUIQUE CURBELO

La Consejería de Sanidad ha emitido un segundo informe sobre la planta de biomasa que la multinacional Ence (Energía y Celulosa) quiere instalar en el Puerto de La Luz. Como ocurrió con el primero, en este documento se desaconseja la puesta en marcha de esta infraestructura por sus efectos nocivos sobre la calidad del aire.

Fuentes de la Consejería explicaron ayer que el informe ya a sido remitido a la Dirección General de Protección del Paisaje, que es la instancia que lo ha solicitado. Por su parte, desde este área del Gobierno canario señalaron que ya se ha recibido el estudio y que, a partir de ahora, es preceptivo llevar a cabo una serie de trámites que terminarán con la aprobación o no de la construcción de la incineradora en La Esfinge, en base al Informe de Impacto Ambiental.

El pasado julio, Sanidad ya elaboró un primer documento desfavorable en el que se afirma que la construcción de una planta de biomasa en La Esfinge sería perjudicial para la salud de la población. Además el Puerto y la ciudad son entornos contaminantes en su medida, con lo que añadir otro factor contaminante sería dañino a largo y corto plazo para la ciudadanía de la Isla y en especial para los residentes en la capital grancanaria.

Tanto el presidente del Puerto, Luis Ibarra, como del Cabildo, Antonio Morales; y el alcalde capitalino, Augusto Hidalgo, se han mostrado contrarios a la autorización si eso significa que los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria sufrirán la presencia de partículas contaminantes.

Además, Carlos Velázquez, presidente de la delegación de Profor en Canarias, afirmó que el complejo que la multinacional pretende implantar en el Puerto se nutrirá de "una mezcla de troncos con corteza, ramas, hojas y algo de tierra", que "trae consigo una serie de patógenos, desde los bichos que están por la corteza y la tierra, o los hongos que se encuentran en las hojas". En una central como la de Ence, que pretende mover medio millón de toneladas de madera al año, Velázquez considera que es "técnicamente inviable garantizar que no entren patógenos, más bien lo contrario, entrará un gran mix de biodiversidad" que, en su opinión, puede poner en peligro a especies endémicas del Archipiélago.

Para mover tanta madera, Ence planea movilizar hasta 14 barcos madereros al año con residuos forestales para dar funcionamiento a la planta de biomasa. Por ello, la compañía ha solicitado 48.024 metros cuadrados en el muelle de La Esfinge para agilizar el transporte de los residuos a la planta. La madera procederá en su mayoría de Brasil, aunque también se proyecta suministrarse de países africanos y la Península.

La planta de Ence supondría una inversión en el Puerto de 150 millones de euros. El complejo tendría una capacidad de 70 megavatios y quemaría un volumen anual de medio millón de toneladas de madera. La planta podría generar 560.000 megavatios hora de producción anual. En Canarias se consumieron el año pasado 8,5 millones de megavatios hora de energía.

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