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Un maestro niega abusos a una niña y replica que solo le dio un achuchón

El profesor asegura que le dio ánimos a la menor - Atribuye el juicio a tres alumnas por ponerse a "jugar a los Ángeles de Charlie"

Un maestro niega abusos a una niña y replica que solo le dio un achuchón

Un maestro de Educación Física, con 20 años de experiencia en el CEIP Mesa y López, negó ayer que abusara de una alumna de 11 años con síndrome de Down en abril de 2013. "Fui al cuarto de materiales, me la encontré allí y le di un achuchón para darle ánimos", declaró Mario A. O. ante la Sección Primera de la Audiencia de Las Palmas.

El acusado, que se enfrenta a una pena máxima de siete años y medio de cárcel, asegura que conoce a la niña desde que entró en el centro y ésta ha ido "de más a menos" en su actitud, pues dejó de ser participativa y comenzó a esconderse en el cuarto de los materiales. El profesor asegura que ese 22 de abril de 2013 fue a coger unas pelotas de tenis y se la encontró allí. Por eso asegura que le dio el achuchón, para animarla y convencerla de que volviera al patio a terminar los ejercicios. Mario A. O. se considera un docente "afectuoso" en el trato con los alumnos y siempre se ha mostrado así con ellos en público.

El imputado atribuye lo sucedido a una "elucubración" de un grupo de alumnas del colegio, quienes, al sentirse "ociosas" en sexto curso, se pusieron a jugar a "los Ángeles de Charlie" y se inventaron lo que ocurrió en el cuarto de los materiales.

Asimismo, con la finalidad de explicarse lo sucedido, ha llegado a la conclusión de que la menor "estaba enamorada" o "tenía cualquier tipo de enganche hacia mi persona", declaró el imputado en la primera sesión del juicio. La vista continúa el 10 de febrero con las pruebas periciales.

La víctima y tres compañeras de clase sí testificaron ayer, pero a puerta cerrada por decisión de la Sección Primera de la Audiencia, para preservar la intimidad de las menores. Se trata de las alumnas que revelaron los hechos al tutor, según explicó este al tribunal. Fue al día siguiente, el 23 de abril. Las estudiantes le dijeron que, al mirar por la ventana del cuarto, vieron a su compañera con los pantalones bajados y al profesor de gimnasia detrás de ella.

El tutor, tras pedir detalles y hacer comprobaciones, como preguntar a la menor si era verdad que solía estar a solas con Mario A. O. en el cuarto, creyó a sus alumnas y elevó un informe a sus superiores, ya que no encontró contradicciones en sus relatos y le sorprendió la "vehemencia" con la que se pronunciaron.

La directora y la orientadora, que también testificaron en sesión de ayer, convocaron a los padres a una reunión, la niña admitió los supuestos abusos y el centro dejó la situación en manos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), que arrestó al maestro y lo puso a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Las Palmas de Gran Canaria. La juez le imputó un delito de abuso sexual continuado y dictó una orden de alejamiento. El fiscal, tras concluir la investigación, reclama tres años de prisión, mientras que la abogada de los padres eleva su petición hasta los siete años y medio de cárcel. Los abusos, según esas conclusiones provisionales, consistieron en tocamientos.

La defensa, que es ejercida por Juan Rosa Domínguez, reclama la absolución. La clave, según la letrada, está en la prueba pericial que se celebrará el 10 de febrero.

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