El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria estudia la posibilidad de negociar con la Empresa Mixta de Aguas (Emalsa) para reducir la deuda, ha informado este viernes el alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo.

La decisión judicial que obliga al Ayuntamiento a pagar 7,2 millones de euros por el impago de las facturas entre enero de 2013 y abril de 2014 correspondientes al servicio de saneamiento, "demuestra el agujero de 20 millones que vengo denunciando desde hace semanas", ha manifestado Hidalgo, para quien "se confirma algo que se caía de maduro".

La corporación analiza las posibilidades que tiene con el fin de que los gastos no aumenten, ya que repercuten en los ciudadanos, que son los que tendrán que pagar "las bravuconadas de un alcalde en el pasado", ha dicho Hidalgo.

El alcalde ha acusado al anterior grupo de gobierno de actuar con "un estilo gamberro" al no haber asumido sus obligaciones contractuales con la empresa, lo que ha generado 700.000 euros de intereses en el período de enero de 2013 a abril de 2014, que pueden ser más con los de 2015.

El alcalde ha denunciado que, además, "el Ayuntamiento anterior pagó a una consultoría externa elegida por ellos, Análisis Ingenieros, para que les verifique que los trabajos se han hecho. La empresa verifica que los trabajos se han hecho en 2013 y 2014 y lo que hace el Consistorio del PP es que ni le paga a la consultora ni acepta el trabajo y, además, sigue sin pagar las facturas de Emalsa".

El Ayuntamiento "actuará con la ley en la mano, con la máxima rigurosidad" para que los ciudadanos controlen la gestión del agua.

"Vamos a hacer las cosas no sólo con sosiego, sino con la legalidad en la mano, no actuando de forma gamberra y en contra de los intereses de los ciudadanos. Vamos a intentar por todos los medios incluso que esa deuda se acorte a través de la negociación e impidiendo que esto se vuelva a producir", ha dicho Hidalgo.