Las administraciones no se ponen de acuerdo. Los jardines que separan la autovía marítima del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria continúan plagados de basura -colillas, en su mayoría- mientras la disputa entre Concejalía de Limpieza del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias prosigue, sin determinarse la competencia y responsabilidad del acondicionamiento del parterre. Fuentes del Servicio Canario de Salud aseguran que tienen constancia del informe del servicio municipal de Patrimonio -fechado en 2009- en el que los técnicos certifican que la zona no figura como de titularidad del Consistorio, pero que en el Catastro aparece que, a partir de la acera de urgencias, finaliza la propiedad del Servicio Canario de Salud.
Desde Sanidad también se ha explicado que, a pesar de que no es su competencia, la semana pasada el Servicio Canario de Salud procedió a la limpieza de los jardines, y que la próxima se volverá a hacer. No obstante, este periódico ha podido comprobar que el parterre continuaba ayer en el mismo estado.
Inmaculada Medina, concejala de Parques y Jardines del Ayuntamiento capitalino, en respuesta al argumento del Servicio Canario de Salud, comentó que "si tenemos que buscar disculpas, cualquiera es buena", y volvió a remitirse al informe de Patrimonio para garantizar que "esa zona es territorio del Hospital Insular". "Nosotros nos guiamos por lo que pone en Patrimonio y tenemos claro que no es competencia del Ayuntamiento", agregó.
Eso sí, la edila ofreció una ayuda puntual para evitar un problema de falta de higiene. "Otra cosa es la colaboración entre administraciones", puntualizó, "en caso de necesidad, por una cuestión de salubridad, si Sanidad pidiera ayuda en un momento puntual, se la daríamos". "Pero son ellos los que tienen que buscar la solución definitiva, porque es su responsabilidad", añadió Medina.
Una técnico de ambulancias del Servicio Canario de Salud comentó ayer que le parece "fatal" el estado en que se encuentran estos jardines. "No es una buena vista ni un buen ejemplo, debería haber, como mínimo, un cenicero; porque aquí fuman todos: familiares, taxistas, enfermeros... Que lo arregle el que sea responsable de esto lo antes posible", apuntó.
Un grupo de taxistas que paró ayer en la zona lo calificaron de "hediondez, denigrante y tercermundista, y más con un hospital al lado". "Antes, hasta hace unos dos meses, había personal de limpieza que se encargaba de acondicionarlo, pero ahora está que da pena, porque encima la gente sigue tirando los cigarros ahí, algunos incluso los lanzan encendidos y más de una vez hemos tenido que echarle agua para apagarlos", indicó uno de ellos.
La familiar de un paciente del Hospital Insular, la teldense Sofía Navarro achacó el estado de suciedad de los jardines a los propios fumadores. "Es responsabilidad de la gente. Yo misma soy fumadora, pero me busco la vida para encontrar un cenicero donde tirar la colilla, no lo echo ahí", señaló Navarro.
Zona libre de humo
Otro familiar de un paciente opinó también ayer de forma similar: "Yo también fumo, pero no tiro el cigarro en el jardín; lo que sí es verdad es que deberían poner aquí un cenicero y así se solucionaría el problema".
Lo cierto es que la entrada al recinto está repleta de carteles que recuerdan a los usuarios, pacientes y trabajadores que se encuentran en una zona en la que no se puede fumar, si bien no son precisamente pocos los que incumplen esta prohibición.
