La Federación Canaria de Golf apuesta porque se mantenga el complejo deportivo de La Minilla, cuyas instalaciones gestiona desde que a mitad de 2013 el Ayuntamiento de la capital grancanaria le pidió que se hiciera cargo d el centro, para evitar su cierre mientras rescataba la concesión de la empresa filial de Evemarina, Las Palmeras Golf. En los casi tres años que han pasado, la entidad sin ánimo de lucro ha mejorado las instalaciones, normalizado la gestión de la activada deportiva y el secretario de la federación, Luis García Ayuso, asegura que se ha ido liberando progresivamente de cargas al Ayuntamiento, el dueño de las instalaciones.
Los usuarios y abonados del complejo generaron el pasado año unos 380.000 euros, que la Federación ha destinado a la gestión y mantenimiento del complejo. Los tres restaurantes y la discoteca permanecen cerrados desde hace un año, tras ser desahuciados por el Ayuntamiento, porque según asegura García Ayuso, se "negaron a asumir el pago de luz, agua y otros gastos comunes".
En el viejo centro comercial, el único negocio que permanece abierto es la tienda deportiva y la federación se ha hecho cargo de la explotación del salón de eventos, donde todavía se siguen celebrando bodas, bautizos y otros actos. Hay otro centro de actividades que puede ser utilizado por todos los colectivos. A lo largo del pasado año pasaron por el complejo unas 50.000 personas para jugar al golf, pádel y otras actividades deportivas, recreativas y culturales que se ofrecen. El gobierno municipal se plantea ahora sacar a concurso la gestión de las instalaciones, tras alcanzar un acuerdo hace unos meses con la administración concursal de Las Palmeras Golf, a la que tendrá que pagar 4,1 millones por recuperar el complejo. "Cuando llegamos aquí, el campo de golf y el resto de las instalaciones deportivas estaban muy mal. Las hemos puesto en condiciones, hemos adquirido nueva maquinaria de mantenimiento porque la que había estaba inservible y hoy podemos decir que este centro se ha convertido en un centro socio-cultural y deportivo. Hemos conseguido que sea algo más que un centro deportivo", sostiene García Ayuso, que aclara que la federación no entra ni sale en la decisión que adopte el gobierno municipal sobre el complejo. "Si quiere ponerlo en manos de una empresa privada, nos parece bien. Si le interesara seguir con la federación, nosotros encantados, y además buscaríamos la fórmula para liberar al municipio de las cargas" económicas que aún soporta, como el pago del agua para regar el césped y la luz.
Aclara que el Ayuntamiento se gasta hoy en día muchísimo menos dinero que en 2013, porque la entidad ha ido asumiendo de forma progresiva la mayoría del los gastos del campo.
"Nosotros lo único que queremos es que se mantenga este complejo deportivo, que es único en toda España según asegura la Federación Española de Golf", resalta. El Ayuntamiento firmó en 2013 un convenio con la federación, para evitar el cierre del lugar. En ese año el municipio, al que la anterior empresa concesionaria nunca le pagó el canon anual de 70.000 euros establecido, se encargaba de pagar el agua, la luz, la limpieza y la seguridad. "Al año siguiente, en 2014, firmamos una adenda al convenio, donde se establecía que, además de gestionar las instalaciones, íbamos a tratar de asumir gastos para quitarle cargas al Ayuntamiento. Desde julio de 2014, asumimos la vigilancia". Otra cuestión que resalta García Ayuso son los precios "populares y sociales" que tiene el complejo. El abono mensual vale 42 euros y las clases de golf para niños tienen una cuota mensual de 32 euros. El responsable de la federación destaca también que el complejo ofrece gratuitamente a los adultos las primeras diez clases para aprender los rudimentos del deporte del golf. "Mucha gente no viene porque se piensa que está cerrado. Es además un deporte ideal para la gente mayor. La mayoría de los 120 abonados son mayores", asegura.
