Ya se presentó en una ocasión durante la época de Juan Marrero Portugués, ¿cómo afronta ahora su candidatura a la presidencia?
De una forma distinta, con más experiencia respecto a los acontecimientos del club y con un ánimo distinto e ilusión renovada, puesto que el club está en una situación compleja pero no insoluble. Somos grandes conocedores de la vida social, porque vivimos el club en el día a día, no solo en el sector deportivo, sino también en el social. Nuestra finalidad, fundamentalmente, es devolver al socio la ilusión, la confianza y que, cuando empiecen a surgir los problemas, se les den unas soluciones que siempre el socio conozca antes de.
¿Son distintas las motivaciones que lo llevan a presentarse aquella vez y ahora?
Sí. Siempre hay un factor común, que es el cariño que uno le tiene a esta sociedad, que es, como todos la llaman, nuestra segunda casa, donde espero que tanto yo como mis hijos, y espero que mis nietas, tengamos una actividad intensa, puesto que el club tiene que ser de todos y para todos. Hay muchísima gente que no conoce el club, no saben de lo que disponemos. Con el esfuerzo que han hecho las anteriores directivas, tenemos un club extraordinario, que puede ser el mejor club de España, no solamente en el aspecto deportivo por sus consecuciones y trofeos, sino además porque la vida social aquí se respira de una forma distinta, gracias a nuestro clima, a nuestra idiosincrasia y al esfuerzo que está haciendo mucha gente para sacar esto para adelante.
¿Desde cuándo es socio del club?
Desde los 18 años, y ahora tengo 67. Pero entré a formar parte de la vida social del club con 14, cuando empecé a navegar, construyéndome mi primer barco.
Vamos, que se conoce el club al dedillo.
Efectivamente.
¿Es Adolfo López la alternativa?
Yo espero que sí. Las tres candidaturas son distintas, aunque todas llevan un factor común: la ilusión por sacar esto adelante. Queremos hacer una campaña distinta, y los tres candidatos nos hemos puesto de acuerdo con que no haya descalificaciones de ningún tipo y que no haya un mirar para atrás de lo que han hecho mal los otros. Esto no es una plataforma ni política ni de relevancia social. Cada candidatura va por caminos distintos para conseguir lo mejor, pero seguro que el que salga elegido lo hará tan perfectamente que todos los que no salgan le ayudarán a conseguir su propósito.
¿Cuáles considera que han sido los principales problemas del club en estos años?
Quizás la desorganización en determinadas áreas. No quiero hablar de mala gestión ni de mala administración; quizás porque son eventos muy importantes los que se han hecho y que exigen una organización muy determinada, que quizás ha sido precipitada, con una acumulación de falta de medios en algunos momentos y de falta de conexión con las instituciones que nos deberían ayudar más a conseguir nuestros objetivos, sobre todo porque hacen una proyección de Gran Canaria y del Archipiélago. Quizás eso, que es una organización de personas y con tiempo, es lo que haya fallado.
¿Cuál es su opinión respecto a la polémica de los 34 socios expedientados?
Esos expedientes están ahora mismo sobreseídos y nosotros lo único que vamos a hacer, como entidad, es pedirles disculpas por la actuación de nuestro club. Y punto; ahí se tiene que terminar el hablar de esto.
¿Cuáles son las principales propuestas de su candidatura?
En primer lugar, conocer absolutamente todas las áreas que conforman el club: la económica, la de personal, la náutica, la de actividades... Conocerlas en profundidad con sus practicantes para, sin ahora dar soluciones, sí escucharlos atentamente y que al final de una conversación se queden convencidos de que su objetivo es el prioritario. Serán después los medios con los que contemos los que nos darán la posibilidad de ver hasta dónde llegamos.
Hay quien dice que una entidad sin ánimo de lucro no tiene por qué tener dinero ahorrado. ¿Usted qué opina?
Efectivamente, lo ideal sería estar a cero, en el sentido de que ni se debe ni nos deben. No se puede analizar ahora mismo la situación económica del club, puesto que sería una aventura y un riesgo innecesario decir que nos vamos a encontrar con tal cosa o con tal otra. Lo que sí es evidente es que, cualquier problema, siempre se ha resuelto; para ello, lo que tiene que haber es una magnífica gestión, una administración responsable pero no cicatera y dar todo lo que se pueda, pero nunca más.
¿Qué más puede contar acerca de su programa?
Queremos hacerle sentir al socio que nuestro club lo conforman todas y absolutamente todas las actividades. Nosotros no somos ni náuticos ni no náuticos; entre nuestros objetivos está que ese tipo de divorcio que existe ahora mismo entre el sector deportivo y el resto de la sociedad se olvide. Que el señor que nunca ha visto un barco en el agua esté invitado y verdaderamente lo practique. Que el señor que nunca ha ido a un gimnasio lo visite, porque a lo mejor está pagando por otro fuera cuando aquí tenemos uno extraordinario, de los mejores de la ciudad. Que el joven que no viene aquí porque ve su club lejano, que entre porque hay actividades que verdaderamente le preocupan, están resueltas y además se le hace partícipe.
¿Tiene un eslogan la candidatura?
Tengamos el club que los socios queremos. Dentro de nuestra candidatura va mucha gente joven, pero no por el hecho de ser más jóvenes o menos tienen que hacerlo mejor, pero el coraje sí es distinto.
Y, en cuanto a la actividad náutica, ¿tienen pensado potenciarla de alguna manera?
Ahora mismo está disparada en su éxito, pero entendemos que puede sufrir una mejora sustancial de tal manera que se consigan los mismos objetivos pero, posiblemente, con una redistribución más organizada de los medios que tiene. Que el socio no se sienta estorbado por determinadas cosas ni haga una crítica feroz a determinadas cosas de la náutica. E insisto, la náutica es importante, pero no es lo único.
¿Cómo son las relaciones con la Autoridad Portuaria?
Por la parte nuestra muy buenas, puesto que la Autoridad Portuaria siempre ha contribuido con el Club Náutico y ahí tenemos la extraordinaria marina que, gracias a muchos socios y a muchas directivas, ha salido adelante. Y hoy tenemos una marina que es la envidia de todo el Archipiélago: funciona extraordinariamente y, si fuera el doble, se llenaría el doble.
¿A qué se compromete si gana?
El único compromiso que hay es de entrega absoluta con toda la ilusión. Creemos en nuestro club, sabemos de nuestro club y entendemos que vamos a hacer mucho para equivocarnos poco. Evidentemente, vamos a tener nuestros errores, pero creo que la forma de hacerlo y la voluntad de hacerlo hará que la gente nos los pueda disculpar. Porque, precisamente, vamos a contar con ellos para enmendar todas aquellas cosas en las que haya un objetivo que se pueda torcer.
En plan ambicioso, ¿cuáles considera que deben ser los futuros proyectos del club?
El club necesita mejoras de mantenimiento. Disponemos de un edificio emblemático, revisado por un magnífico arquitecto, Manuel de la Peña, y contamos con unas instalaciones extraordinarias, pero muchas de ellas obsoletas. Cada día entran muchos socios aquí, y las instalaciones hay que renovarlas continuamente. Esto es un gran hotel, y como tal necesita una dedicación y un conocimiento extraordinarios, y eso desemboca en que el socio esté con un confort extraordinario.
Para terminar, ¿qué cree usted que significa el Club Náutico para la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria?
El club ha sido y es un referente para todo el mundo, no solamente para Las Palmas de Gran Canaria. Empezó en 1907 y siempre fue, junto con Barcelona Y Palma, el club puntero, y tenemos el récord del mundo del mejor palmarés del mundo; y continúa, no ha mermado, como algunos piensan. Nuestras instalaciones son extraordinarias, pero el problema es que, por la crisis, un montón de actividades se han quedado a medias. Quizás lo que deba hacer es seleccionar actividades para tener, a lo mejor menos, pero mejores. Hablo de actividades como las fiestas, que son importantísimas para los socios, y habría que recuperar las de antaño; si tienen que ser bianuales, que lo sean, pero que se disfruten con intensidad. Y en el aspecto cultural, también: cualquier conferenciante, artista, monologuista, actor, letrista, escritor... que pase por las Islas Canarias tiene que venir a nuestro club, para contaminarnos con el acervo cultural que tiene España, que es un país que puede dar mucho en ese sentido.
