Una hora para condensar 60 años de esfuerzo y tesón. Para evocar la brisa que han sentido al alcanzar una meta. Para homenajear a los que están y a los que se han ido. El Grupo de Montaña de Gran Canaria, cuya sede está en el barrio de La Feria del Atlántico, presentó ayer un documental sobre su historia, en una cinta de 60 minutos, tantos como sus 60 años de vida, que fue presentado en el Museo Elder de la Ciencia, acompañado por Juan Manuel Brito, consejero de Medio Ambiente y Emergencias del Cabildo Insular.
Aunque oficialmente se dieron de alta en la Federación Española de Montaña (FEM) el 2 de Julio de 1954, fue en 1949 cuando se formó un grupo de amigos en Las Canteras que se dedicaron a hacer caminatas por el interior de la isla de Gran Canaria. Las excursiones comenzaron a hacerse con cierta frecuencia y se fue corriendo la voz. De esta manera, y al ver que cada vez eran más, a esta pandilla se le ocurrió la idea de formar un club que estuviese adherido a la FEM, para así poder estar informados de otras actividades en la Península o en el extranjero, hecho que les brindó la oportunidad de ir a formarse a fuera de la isla como monitores de Alta Montaña.
La idea de realizar un documental que reflejase la historia del Grupo de Montaña de Gran Canaria surgió en 2014, cuando cumplieron 60 años de existencia. Desde entonces, y tras la ocurrencia de los socios más veteranos, fueron recopilando información y fotografías antiguas, testimonios y vídeos, de las diferentes actividades que han llevado a cabo desde los inicios. Durante dos años se reunieron los martes para poner en común el material conseguido. El resultado transmite al público la importancia de cumplir su sexagésimo aniversario, "mostrar lo que han aportado a la sociedad los iniciadores y motivadores de esta cultura de montaña a lo largo de la historia es el mejor regalo que podemos hacer", comenta Alejandro Torres, actual presidente del colectivo.
El montañero añade que hay que valorar la contribución que hacen para la conservación del medio ambiente y para dar a conocer los rincones isleños. Sus veteranos comentan que aunque hoy en día están muy popularizadas las rutas de senderismo, en sus comienzos, cuando pateaban algún pueblo del interior, les miraban con extrañeza y les preguntaban si estaban haciendo alguna promesa. Torres cuenta que los primeros integrantes del grupo se fabricaban sus tiendas de campaña y sacos de dormir con sacos de azúcar y materiales rudimentarios hechos por ellos mismos. Apunta que este grupo de montaña, el más longevo de la isla, llevó a cabo iniciativas pioneras como la organización del Día del Árbol; la colaboración con el Museo Canario en las labores de investigación arqueológica; y la apertura de nuevas veredas y zonas de escalada, como por ejemplo la del Roque Nublo.
En sus inicios, Paco Sosa, el actual segundo presidente, recuerda emocionado cuando los compañeros de los años 60 se dedicaron a llenar sus mochilas de juguetes en vez de material de montaña los días 6 de enero, "los pueblos del centro estaban aislados, muchos de los niños no tenían tradición del Día de Reyes o se encontraban cuidando de cabras u otros animales. La cara de ilusión que se les quedaba era impagable". Emotivos testimonios de estos niños, ahora adultos, están presentes en el documental.
Torres señala la importancia de la formación en Alta Montaña que les ha proporcionado la oportunidad de realizar expediciones fuera de las islas, como, por ejemplo, la subida al Everest o expediciones a la Patagonia. Sin olvidar la grata labor de los campesinos de la época, guardas forestales y pastores, pues fueron los encargados de ayudarles a rescatar veredas por el interior de la isla, que antiguamente formaron parte de una red de caminos que se utilizaban para intercambios comerciales y para ir a fiestas y bailes de otros pueblos. Las primeras veces se reunían en casa de sus primeros presidentes Miguel Rodríguez y Vicente García, ahora, han conquistado La Feria.
