El concejal de Movilidad, José Eduardo Ramírez, confía en que el sistema de libranza obligatoria se

pueda reanudar a lo largo de la próxima semana, una vez que los dos magistrados que tienen suspendida la medida, de forma cautelar, oigan la argumentación preparada por los servicios jurídicos del Ayuntamiento. "Esta suspensión cautelar es similar a la del pasado martes y no cambia nada, con respecto a la situación creada por la primera", explicó Ramírez, que expresó su esperanza en que la existencia del sistema de libranzas en otras ciudades, ayude a convencer a los jueces de la legitimidad de la medida. El día libre obligatorio, sostuvo, "se está llevando a cabo aquí exactamente igual que en otras grandes ciudades. De hecho, de las diez grandes ciudades del país, todas tienen regulado el régimen de descanso, salvo ésta, pese a que la ratio de taxi por cada mil habitantes dobla la media nacional", lo que supone un exceso de licencias.

En la capital hay 4,6 taxis por cada mil habitantes, frente a los 2 taxis de media en el resto de grandes ciudades. "Estamos muy por encima de la media y nuestra esperanza es que si este régimen de descanso se hace en otras ciudades similares a Las Palmas de Gran Canaria con una ratio menor de licencias, aquí también se podrá hacer", señaló.

Ramírez rechazó que los dos días libres traigan consigo el despido de 246 asalariados y, frente a las críticas del Partido Popular, aseguró que su departamento dispone de un "estudio económico" en el que se ha amparado la resolución. El edil criticó el "juego político irresponsable" que está haciendo el PP con este asunto, a diferencia de otros partidos de la oposición, como Unidos por Gran Canaria y Ciudadanos, que no han querido entrar en la "bajeza política" de utilizar la implantación de esta medida y el conflicto que ha traído consigo a favor de sus intereses partidistas. "El PP llevaba en su programa la implantación del día libre", dijo el edil. "Poco antes de aprobar la resolución, tanto el concejal Ángel Sabroso como su compañero Jaime Romero llegaron a acusarme de falta de valor para implantar la medida y ahora nos salen hablando de ausencia de participación y consenso", una práctica que se les olvidó, por ejemplo, cuando impusieron el uniforme. "Estoy contento de que por fin hayan entendido que la participación y el consenso son importantes", afirmó. En cuanto a la demanda anunciada por los taxistas para reclamar el lucro cesante, Ramírez consideró que "están legitimados para hacer esa denuncia, pero les pidió que tengan cautela porque la suspensión es una medida cautelarísima".

Por su parte, el portavoz del PP, Juan José Cardona, siguió ayer con sus críticas al gobierno tripartito y, en esta ocasión, expresó su temor de que la "negligencia" del ejecutivo local le "cueste dinero a la ciudad". Cardona solicitó al tripartito que informe sobre las "medidas que va a adoptar ante la incertidumbre que vive el sector del taxi en estos días tras la suspensión de la jornada de descanso del sector puesto en marcha por el gobierno municipal el día anterior". A su juicio, "el concejal de movilidad está tardando en convocar a los representantes del sector y sentarse con todos ellos para abordar las alternativas a este reglamento y encontrar una solución consensuada que redunde en el interés general tanto de los profesionales del sector como del servicio en si". Criticó la aprobación de un reglamento "sin consenso y sin avales técnicos e informes económicos".