El Museo Canario es, tras 137 años de existencia, una caja de sorpresas. Entre el millón de periódicos que posee en su hemeroteca figura uno de 1916 impreso en seda. La noticia la lanzaba esta semana la entidad en su cuenta de Twitter. Lo sorprendente del caso no es solo que se trata de un ejemplar único en su género, sino que es un número del Diario de Las Palmas, el último rotativo vespertino de España, perteneciente a Editorial Prensa Canaria, y que se fusionó en 2000 con LA PROVINCIA. Y hay más. Nadie sabe por qué se imprimió en tela y cómo llegó al Museo, que también guarda varios ejemplares de la misma fecha en papel.
La mancheta del Diario de Las Palmas luce intacta sobre la seda amarilla, oscurecida por el tiempo, pero que aún conserva la pátina de brillo característico de este tejido natural. Lo mismo ocurre con el resto de la tipografía y con los cuatro dibujos de Batllori que aparecen en la primera página del ejemplar, fechado un miércoles, 27 de septiembre, de 1916. Y que corresponde a un pliego del diario, que entonces tenía solo cuatro páginas y costaba 10 céntimos de la época.
El periódico, cuyo primer número se editó en 1893 en horario de tarde, está en perfecto estado de conservación y se puede leer sin problema, salvo en una esquina de la portada, donde la impresión no hizo efecto.
En algunas zonas se observan los hilos deshilachados de la seda y también el corte irregular que alguien le hizo con la guillotina a pie de la primera página, y que de un tajo se cargó la publicidad de una casa de sombreros de París y perfumería a nombre de Madame Madeleine, que entonces existía en el número 15 de la calle San Francisco y que se anunciaba como A la Parisienne. Quién sabe si por respeto al Obispo Verdugo de la Diócesis de Canarias, al que el periodista José Batllori y Lorenzo (1876-1923) le dedicaba una loa a seis columnas -toda la página- con motivo del centenario de su muerte.
Más de dos años ha dedicado el bibliotecario del Museo Canario, Luis Regueira Benítez, a desentrañar el origen del documento y si existe otro similar en alguna otra hemeroteca o museo del mundo. Pero hasta el momento nadie ha alzado la voz. "Estaba catalogado como periódico impreso en tela, pero ni figura en las actas del museo como un regalo de cortesía de los que se hacían entonces, ni como legado de alguien", contaba ayer Regueira, satisfecho por desentrañar como "bibliotecario por vocación cosas tan extraordinarias y en tan buen estado" como el ejemplar del Diario de Las Palmas, al mismo tiempo que destacaba el valor de los fondos documentales que guarda el Museo.
El bibliotecario ha encontrado un libro impreso en la República Dominicana -Raro, pero cierto, de Eduardo Comarazamy- donde se hace referencia a que el Boletín Mercantil, editado en la ciudad dominicana San Pedro de Macorís, hubo de publicarse en una ocasión en tela. El motivo no fue otro que la ciudad carecía de papel por ser los primeros años de la I Guerra Mundial y que el anuncio de una casa extranjera primaba para que no se perdiera el contrato. También, una reseña en el diario LA PROVINCIA (1928) de que El Pañuelo Político (1831 y 1832) se publicó en Francia en algodón... Pero nada impreso en seda.
"Cuando escaseaba el papel por la guerra o por otra cuestión los periódicos disminuían el número de páginas, se hacían en otro formato más pequeño e incluso en otro tipo de papel, pero no es el caso. La única explicación es que se hiciera con motivo del centenario de la muerte de Verdugo", añadía el bibliotecario, aunque curiosamente no hay referencia en el periódico de papel, ni los días anteriores ni posteriores a la impresión del mismo de este hecho, cuya redacción y administración estaba en las calles Pérez Galdós, 51, y Buenos Aires, 36.
El tabloide, tipo sábana, mide 61,5 centímetros de largo por 44 de ancho, dormía en la sección de los mapas, en posición horizontal y sin dobleces, adosado a un cartón y bajo un papel de barrena para mantener su estado de conservación. Tras su estudio pasará a la zona de los carteles publicitarios como corresponde.
El contenido del periódico de aquel día no tiene desperdicio. Tras la loa a Verdugo, la sección de la Hoja Telegráfica da cuenta en breves líneas de las noticias originadas en España y en el extranjero. Como, por ejemplo, los partes de guerra de Berlín, Londres, Viena, Rumanía, Grecia y Francia. No hay que olvidar que la I Guerra Mundial sigue devastando Europa. En la sección Noticias, lo local. Allí se hace referencia a que el Ayuntamiento de la ciudad elegirá pronto un solar para un nuevo matadero porque el existente se ha quedado pequeño; que en Valsequillo se preparan para las fiestas de San Miguel, y que el lunes se halló un cadáver en el pago de la Angostura de Santa Brígida "al pie de un corpulento castaño", así como la detención de los sospechosos del asesinato.
Entre otras noticias, aparece la suscripción iniciada por el Cabildo para poner en marcha el hospital de San Roque, en Guía, o la carta de agradecimiento público de unos obreros del Puerto al comandante de Marina Juan A. Gener, que había autorizado la extracción de carbón mineral que desde hacía más de 30 años se acumulaba en un tramo de la bahía y que había permitido dar trabajo a unas 200 embarcaciones.
Nada tiene desperdicio, incluida la publicidad. La fábrica de Tabacos La Favorita organizaba un "nuevo y extraordinario concurso para repartir 5.400 pesetas (32,45 euros) en premios. La papelería ABC, en Triana, anunciaba las últimas novedades en abanicos y el profesor de masaje de la Universidad de Berlín Ernesto Weber ofrecía en un piso, también de Triana, "masaje manual vibratorio y eléctrico", además de hidroterapia general para jaquecas, asma, diabetes infecciones gástricas y problemas de otro tipo.
