Marcos González Briones y Mari Luz Domínguez Calvo apuraron ayer sus últimas horas en Las Palmas de Gran Canaria junto al mar. A pesar de que la mañana no amaneció especialmente soleada y alguna que otra gota de agua se dejó caer, el matrimonio de jubilados no quiso perder la oportunidad de despedirse de la playa de Las Canteras antes de volver a Madrid, donde residen.

"Este ha sido el penúltimo paseo que nos damos", apunta González de camino al hotel Astoria donde se han hospedado los ocho días que han permanecido en la ciudad durante su viaje "del Imserso". Pero antes de coger el vuelo que les llevará a casa tienen pensado dar la vuelta definitiva, por si acaso no tienen una oportunidad de volver pronto.

Y es que esta visita ha conseguido quitarles una espina clavada desde hace tiempo. "Hemos estado en todas las islas de Mallorca y en las del Archipiélago canario, pero esta es la que nos faltaba", cuentan. Esto fue lo que les llevó a decantarse por la capital a la hora de hacer una de las excursiones que realizan de forma anual con el organismo del Gobierno de España para la gestión de programas y prestaciones para las personas mayores.

El matrimonio se marcha sin arrepentirse de su elección ya que, tal y como aseguraron, han disfrutado mucho de cada visita, tanto dentro del municipio como en otros de Gran Canaria. "Estuvimos también en Maspalomas, en Mogán y en Teror y la verdad es que es todo precioso", cuenta Mari Luz Domínguez. Eso sí, en lo que a las perspectivas climáticas se refiere, el matrimonio confiesa que esperaban algo más de sol. No obstante, no se quejan y esperan poder volver a la ciudad en un futuro.