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Aquí la Tierra Lo alto y lo bajo

Mechas en la red

Un anuncio de Andrés junior peluqueros en la carretera de Lomo Blanco, junto a la entrada del barrio, es un icono pop que merece estar en los catálogos de patrimonio histórico de Las Palmas

Mechas en la red

Los viajeros que han llegado en coche a este barrio desde puntos distantes de Las Palmas, observan con estupor el anuncio, con aspecto de señal de tráfico, y por un instante piensan que para llegar a Silicon Valley hay que pasar, necesariamente, por Lomo Blanco. El rótulo, que apunta en dirección a la entrada de este enclave periférico, se levanta sobre un parterre, en una curva pronunciada de la carretera que lo conecta con el resto de la ciudad. Su inscripción, "Andrés junior peluqueros. Fotos en: Google. Con la palabra (Andresjunior)", juega con distintas tipografías y, en concreto, en el término Google reproduce las formas y colores del logotipo del célebre motor de búsqueda en internet.

Enclavado entre dos barrancos, hay calles de este barrio en las que bastan unos pocos pasos en una dirección, o su contraria, para contemplar los vecindarios próximos cuál si fuesen galaxias lejanas. La topografía, pues, le otorga una importante carga de extrañeza a este sitio, y la señal que nos ocupa, que recibe al borde de la carretera a modo de "Bienvenido a Lomo Blanco", no es sino una reliquia de la cultura pop de Las Palmas, un emblema que le da una vuelta de tuerca alienígena al lugar.

No es necesario haber leído a Robert Venturi para entender que, junto a los yacimientos guanches, las ermitas antiguas, los edificios racionalistas y la chimenea de Arenales, esta señal merece un lugar en los catálogos de patrimonio histórico de la ciudad. Un lugar que ha de dignificarla junto a los monumentos de la alta cultura, como en su momento, sabiamente, se hizo en el conjunto de España con las vallas del toro de Osborne, o las del jerez Tío Pepe.

Múltiples aspectos hacen de este artefacto ordinario algo extraordinario. No es el menor de ellos su forma de punta de flecha, al borde de esta carretera de dos direcciones, que marca algo que antecede y algo que sigue en Las Palmas: lo que antecede son los vestigios de una ciudad por modernizar, como la propia factura artesanal de este rótulo, que imita la reproducción mecánica de la señalética de tráfico y las imágenes de la publicidad masiva. Lo que sigue son los restos de la ciudad ya modernizada, de esta ciudad, nacida en los albores de la modernidad misma, y en la que coexisten una pésima adecuación a su soporte natural, un estallido de la periferia, que pone en crisis nociones como las de campo y centro de ciudad, y una imbricación en su sistema nervioso del espacio con el hiperespacio.

De modo que es ésta una señal que, en su candorosa simplicidad, arma de modo pasmoso un juego potente entre pares dialécticos como aquí y allá, alto y bajo, presencia y ausencia, o local y global. Y es así, pues, que, mientras parece conducir a ciudadanos que vienen de la ciudad baja expresamente a cortarse el pelo en las alturas de Lomo Blanco, conjuga al mismo tiempo la escala doméstica de una peluquería de barrio con la inmensidad del espacio en el que pululan los satélites, que transmiten señales a los móviles y los ordenadores. Ese espacio infinito, del que, por cierto, Lomo Blanco también forma parte.

"Fotos en: Google. Con la palabra (Andresjunior)". De tan ingenuo, este enunciado resulta hipnótico, principalmente porque, en la era en la casi todo aparece fotografiado en esa enciclopedia descomunal y desordenada que es la red, sin embargo es proclamado a los automovilistas como un timbre de distinción. Con todo, impelido por las cautelas que debe a sus lectores, el reportero entra en Google para comprobar que hay fotos en red de Andrés junior peluqueros. Y al hacerlo se encuentra que efectivamente es así, que hay en verdad un nutrido conjunto de imágenes de este establecimiento, y además que también hay textos, y que estos indican que esta empresa ofrece a su distinguida clientela alisados brasileños, coloraciones con efectos 3D, texturizados a navaja en la parte superior y hasta mechas de California.

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