Los informes elaborados por los técnicos de la asociación ARDF Desaparecidos y de la Federación Estatal de Foros por la Memoria determinarán la postura del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria en cuanto a si se lleva a cabo o no la apertura de la fosa común del cementerio de Vegueta, donde se encuentran restos humanos de personas represaliadas del franquismo.
Así lo explicó el concejal de Participación Ciudadana del Consistorio, Sergio Millares, durante la visita que realizaron ayer los técnicos, Santiago Carcas Cuartero y Begoña Hermida Pérez de ARDF Desaparecidos y Pedro García Bilbao de la Federación Estatal de Foros por la Memoria, al camposanto capitalino. "Todavía no hay una posición oficial por parte del Ayuntamiento, estamos abiertos a cualquier cosa que analicemos desde el punto de vista de la información actual y de la que recabemos en el futuro. La información que aporten los expertos hoy [por ayer] va a determinar la posición del Ayuntamiento; lo que nos digan vamos a tenerlo en cuenta para tomar una decisión, para eso están aquí", garantizó el edil.
"Estamos en una fase de investigación, de análisis", prosiguió Millares, "y la visita de los especialistas va en este sentido". "Si el Ayuntamiento llega a la conclusión de que hay que exhumar, lo abordaremos; si llega a la conclusión de que no se puede exhumar porque no se concreta el sitio adecuado, por supuesto este será un lugar de memoria y de recuerdo para los familiares de las víctimas", aseguró.
Al respecto, García Bilbao, sociólogo y profesor universitario, valoró que la zona donde se encuentra la fosa "es un espacio de memoria, es decir, un espacio donde muchas personas fueron enterradas con un dictado de olvido; aunque puede haber una discusión sobre si están más allá o más acá, lo que está claro es que este cementerio y estas fosas son un espacio de memoria que debe ser preservado de alguna forma".
A su juicio, se antoja necesario "preservar los espacios", al igual que ofrecer a las familias un lugar que ligue "el recuerdo con la presencia", y para ello apostó por la construcción de "memoriales o monumentos". "Aunque pudiera faltar el cuerpo concreto porque hayan podido ser destruidos los restos, podría haber un espacio donde figuren los nombres, donde figure el recuerdo y donde se rompa el dictado del olvido", agregó.
Por su parte, Santiago Carcas indicó que el objetivo de su visita se centra en generar "un debate a tratar con el Ayuntamiento y con el Cabildo" sobre la viabilidad de llevar adelante la exhumación en la fosa, así como realizar un trabajo de investigación "en otras posibles fosas en la comunidad".
Tal y como explicó Carcas, los trabajos se centran en dar con los restos de Francisco González Santana y Juan Santana Vega, dos de los fusilados de San Lorenzo, que se encuentran enterrados junto a otras 900 personas, aproximadamente, según asegura Millares que figura en el libro de registro del cementerio. "Las familias lo han pedido y vamos a estudiarlo; se está analizando la documentación de que disponemos, que es fundamentalmente el libro de registro del cementerio. Ya sabemos en qué cuadrado están estos dos fusilados y ahora tenemos que determinar la zona y la ubicación concreta", apuntó el edil. Los otros represaliados -en torno a 60- que aparecen en la lista publicada por las asociaciones de memoria histórica la semana pasada estarían inhumados, tal y como aclara el concejal, en otras fosas del mismo camposanto.
