El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria llevará a cabo la rodonalización de las calles Malteses y Losero con el fin de calmar el tráfico de la zona y facilitar el uso a los peatones de este espacio urbano. Para ello se ampliarán las aceras de ambos lados de la calzada, se hará una superficie continua y se trasladará la actual parada de taxis de Malteses a Losero, entre otras medidas. La actuación, presupuestada en 1.036.448,81 euros, está a expensas de conseguir una financiación que, tal y como apunta el concejal de Urbanismo del Consistorio capitalino, Javier Doreste, espera que sea a través del plan de Zonas Comerciales Abiertas, si bien no descarta lograrla a través de otra vía, como puede ser el Plan de Cooperación del Cabildo de Gran Canaria. "El proyecto, que es de octubre de 2015, está ya preparado para ser presentado", asegura. En cualquier caso, Doreste confía en que la obra, cuyo plazo de ejecución establecido es de diez meses, se acometa antes del final del presente año.
Así, la prioridad es favorecer al peatón pero sin cerrar el tráfico, si bien se reducirá la limitación de velocidad en la calzada, por donde circularán los vehículos y que estará situada entre las dos aceras. Igualmente, la actuación conllevará la eliminación de los aparcamientos de estas dos calles, muchos de los cuales son ahora mismo plazas de zona azul. La superficie global de la actuación es de unos 2.550 metros cuadrados y comprende las calles Malteses y Losero , así como el tramo de la confluencia de estas dos con la calle Triana.
En la calle Malteses, en la parte que va desde General Bravo hasta Peregrina, se diseñará una plataforma con una calzada central de 3,20 metros y dos zonas peatonales laterales de una dimensión mínima de dos metros. En el tramo que discurre entre Peregrina y la calle Triana se introduce como singularidad respecto al tramo anterior una zona de 2,80 metros de ancho en la que se dispondrán áreas de carga y descarga y cinco árboles. En la intersección con Triana, se mantendrá el pavimento actual de la calle mayor.
En la calle Losero, además, se formalizarán cuatro bandas longitudinales que se corresponderán con dos franjas contiguas a las fachadas de las edificaciones, de carácter peatonal; una zona donde se establecerá la actual parada de taxis de Malteses; y, en la franja central, el carril de circulación de los vehículos.
En el proyecto se expone que la propuesta trata de conseguir un espacio libre en el que los ciudadanos se sientan cómodos y en el que las relaciones entre los diferentes flujos, de peatones, de vehículos, actividad comercial, servicios y áreas de estancia, no interfieran entre sí. Para ello, adquiere relevancia tanto la delimitación concreta de las zonas con usos específicos como el dimensionado de las diferentes plataformas de circulación.
Asimismo, se considera importante potenciar las cualidades del lugar y su conexión con la red de espacios, infraestructuras y estrategias que el desarrollo urbanístico puede deparar en esta zona de la capital grancanaria. En definitiva, se trata de concebir un espacio de paseo, con tránsitos rodados, polifuncional, comercial, de ocio, estancia, lúdico y, en general, capaz de asumir diferentes lecturas y modalidades de utilización, mayores cuanto más fácilmente accesible sea.
El objetivo fundamental es potenciar las cualidades estratégicas del sitio, las cuales, destaca el informe, se han ido evidenciando a lo largo de los años, a través de todas las actuaciones urbanísticas de similar naturaleza que se han ido desarrollando en el entorno de Vegueta y Triana, y dentro de las cuales esta sería una más.
Pavimento
En cuanto al pavimento, se dará continuidad a los acabados del entorno y se trabajará con la textura de las terminaciones -más rugosa o lisa- para potenciar y facilitar determinadas formas de utilización, sobre todo las referidas a la circulación de personas. De este modo, las zonas propicias para ello serán homogéneas, antideslizantes y carecerán de resaltes, mientras que las de los vehículos serán de superficie más áspera e irregular, con el fin de ralentizar la marcha.
Según el edil de Urbanismo, se trata de una actuación "necesaria", y es, además, la continuación del proyecto en el que se ha favorecido el uso de la vía para el peatón en el barrio de Triana. "La zona tiene mucha intensidad de tráfico, más de la que conviene", señala Javier Doreste. "Tenemos que tener esto terminado antes de meternos con otras cosas, no se pueden dejar las cosas a medias; aunque también es cierto que hemos bajado quizás el ritmo de las terminaciones porque no todo el dinero se tiene que invertir en la zona baja de la ciudad".
