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Unas 50 casas protegidas de Vegueta y Triana podrán subir más de una planta

La mayoría de los inmuebles que crecen están en Triana, Malteses, Pérez Galdós, Juan de Quesada y Francisco Gourié

La gasolinera de Primero de Mayo, cerrada hace unos meses. JUAN CARLOS CASTRO

Medio centenar de viviendas protegidas del casco histórico tendrán la posibilidad de añadir entre una y tres plantas a la construcción original, cuando entre en vigor el nuevo Plan Especial de Protección (PEP), que sustituirá al actual Pepri, una vez que la corporación de la capital grancanaria lo someta a la aprobación del pleno a finales de este año. La mayoría de estas casas, a las que el Ayuntamiento da luz verde para que puedan incrementar la edificabilidad, están situadas en las calles de Triana, Francisco Gourié, Malteses, Reyes Católicos, Juan de Quesada, Ramón y Cajal, Audiencia, López Botas, Pérez Galdós, Constantino y Plaza de San Bernardo. La nueva ordenanza incluye también la reducción de plantas en más de un centenar de casas del casco histórico, en el caso de que sus dueños se planteen derribar la actual edificación y construir una nueva.

Los redactores del plan han tenido en cuenta, para dar luz verde al aumento de alturas en los inmuebles catalogados, una serie de variables, como la altura de las edificaciones existentes en la calle, la manzana y el entorno inmediato y persigue la homogeneización de las plantas y la eliminación o reducción de los impactos visuales que causan las medianeras o "saltos muy pronunciados" en alturas "que no se justifiquen".

Lentini

Por ejemplo, en el inmueble del siglo XVI de la calle Triana, esquina con Lentini, se permitirá aumentar una planta más sobre la cubierta, de una altura máxima de 7,5 metros, que "minimice el impacto producido por las medianeras colindantes" y que sea compatible con el uso cultural del inmueble. La segunda planta deberá retranquearse tres metros.

Entre las protegidas y las no catalogadas, la posibilidad de elevar entre una y tres alturas y -en casos aislados- hasta seis plantas, son más de 110 inmuebles los que podrán acogerse a esta posibilidad, que supondrá en la práctica un aumento de la edificabilidad de 12.640 metros cuadrados, un volumen que se neutraliza con los 14.044 metros cuadrados que se disminuyen, con la reducción de plantas. En conjunto, el volumen edificable disminuye 1.404 metros cuadrados en el casco histórico. En este cómputo no se incluyen otros 16.034 metros cuadrados de aumento de edificabilidad, que recoge el nuevo plan, porque ese incremento de alturas que se permite en unos 60 inmuebles, ya se ha llevado a efecto en la práctica y, en algunos casos, hasta ha superado la altura que se autoriza.

El nuevo plan de protección se plantea como principal objetivo hacer compatible la protección del patrimonio con la reactivación del casco histórico, dando vía libre a actuaciones urbanísticas y comerciales y la ampliación de lo usos permitidos que permita invertir la tendencia al despoblamiento que han soportado Triana y Vegueta en los últimos veinte años. Se intenta que vuelvan los residentes. Sólo Vegueta ha perdido más de un 20% de vecinos en dicho periodo.

La autorización para añadir plantas supone un incentivo para la rehabilitación porque permitiría, si así lo quisiera el dueño, rentabilizar la inversión. Los redactores del plan sostienen que estas actuaciones respetarán el patrimonio, el paisaje y los valores que caracterizan a estos barrios históricos. De hecho, se introduce la Norma VT, a la que se tendrán que acoger todos los edificios no protegidos, que constituyen el 50% del tejido residencial de Vegueta y Triana. Urbanismo pretende que la renovación de estos inmuebles no protegidos "se produzca de forma respetuosa con los valores que caracterizan a esos barrios históricos", pues "cualquier intervención en un área de tanta fragilidad como la que nos ocupa presenta un potencial destacado de riesgo de alteración irreversible de los valores de patrimonio histórico, arquitectónico o paisajístico".

Así, la Norma VT pretende recuperar la "homogeneidad y continuidad morfológica de Vegueta y Triana, así como el impulso y la regeneración de estos barrios sin distorsionar su carácter histórico".

Vía libre a un edificio de siete alturas en la gasolinera de Primero de Mayo

  • La parcela de la calle Primero de Mayo, número 4, que hasta hace unos meses albergaba una estación de servicio, dejará de tener este uso y pasará a ser residencial, según establece el nuevo Plan Especial de Protección (PEP) de Vegueta y Triana. La parcela donde estaba la gasolinera de DISA, cerrada hace unos meses y en venta, podrá acoger un edificio de siete alturas, en concordancia con el resto de edificaciones que hay en la manzana.El viceportavoz del Partido Popular, Ángel Sabroso, aplaudió ayer el cambio de catalogación de esta parcela de Primero de Mayo, para hacerla residencial, así como la del Palacete de San Bernardo o la antigua sede de Correos, ya que a su juicio, son "apuestas" por la "economía y la generación de actividad"."Se nota y mucho", sostuvo Sabroso, "el momento en que este documento fue elaborado", cuando gobernaba el popular Juan José Cardona, "con una filosofía clara de gobierno que apostaba por la revitalización económica, favorecer la construcción y potenciar el turismo y hay que reconocer que el actual gobierno no ha cambiado estos objetivos con el plan que se encontró casi terminado". El edil expresó su "agrado" al considerar que el gobierno tripartito ha "superado el trasnochado cliché de denostar las alturas en las construcciones", algo que se refleja en el nuevo plan. También aplaude el PP la apuesta por "el negocio y las empresas, generalizando el uso comercial y de oficinas en los dos barrios históricos, así como la extensión del uso hotelero a todo su ámbito". Sabroso mostró sus dudas, sin embargo, en torno a la peatonalización de la calle de San Bernardo, sobre la que pidió prudencia.

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