"Debe ser prudente, sin debilidad, firme, sin violencia y político sin bajeza". Estas son las cinco características que Francisco Javier Girón y Ezpeleta las Casas y Enrile, II Duque de Ahumada y primer director de la Organización de la Guardia Civil, estableció en el quinto artículo de la Cartilla que escribió de su puño y letra para regular el nuevo cuerpo militar que había comenzado a funcionar en España. Más de una centuria después, estas palabras volvieron a resonar en la ciudad durante la ceremonia en la que la Guardia Civil celebró el 172 aniversario de su fundación. Un acto sencillo, que se lleva a cabo por cuarto año consecutivo, en el que también se hizo entrega de cruces de la Orden del Mérito con distintivo blanco.
El Centro de Coordinación Regional de Canarias (CCRC) es el lugar en el que funcionarios del cuerpo de seguridad del Estado, familiares, candidatos del PP al Congreso como María del Carmen Hernández Bento, Matilde Asián o Guillermo Mariscal o la directora general de Presidencia y Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento capitalino, Eulalia Guerra, se dan cita. Ante una abarrotada sala, el primero en tomar la palabra es el comandante que dirige el CCRC desde hace dos años, Agustín Barroso, que también fue condecorado. En total, se habían concedido 14 distinciones entre cargos, agentes y personal ajeno al instituto armado (un vigilante de seguridad y un brigada de la gendarmería marroquí), pero hubo cinco ausencias.
La ceremonia estuvo también marcada por la historia. El encargado de recordarla fue el coronel jefe de la Comandancia de Las Palmas, Ricardo Arranz Vicario, quien hizo un repaso por los inicios de la institución militar que se creó con dos Reales Decretos, el del 28 de marzo y el del 13 de mayo de 1844.
No fue hasta 54 años después cuando la Guardia Civil se instaló en el Archipiélago, inicialmente, en Tenerife. Un año más tarde, el 1 de enero de 1899, el cuerpo de Seguridad del Estado llegó a Gran Canaria. "Llegó una fuerza compuesta por un segundo teniente, Francisco Amat; un sargento, Antonio Olmedo Fernández; un cabo, Domingo Muncusi; y nueve guardias segundos: Juan Perrucho, Pedro Mozo, Ramón Noguera, Ramón Álvarez, Nicolás Recio, Antonio Miranda, Francisco Garbajosa, Ignacio Pérez y José Fortuño. En total, 12 componentes para la creación de los puestos de Las Palmas y el Puerto de La Luz".
El coronel jefe también rememoró la Cartilla del Guardia Civil que el propio Duque de Ahumada redactó con el fin de configurar un perfil de soldado- policía adecuado. El texto, que se divide en tres títulos , regula prácticamente todo sobre la forma de proceder de los agentes las 24 horas del día, desde su aseo personal, hasta la vestimenta. El primer director general también creó conceptos organizativos como la pareja, el puesto y la casa- cuartel que han logrado llegar a la actualidad. "Pese a los cambios en las sociedades y en las costumbres de los tiempos parece que Ahumada alcanzó con éxito su meta, pues pasados 172 años desde su fundación, la Guardia Civil, según las encuestas del CIS, es la institución más valorada y que genera mayor confianza entre los españoles".
