La asamblea de los trabajadores de la empresa municipal Sagulpa encargada de las zonas azules, las grúas y los aparcamientos municipales de Las Palmas de Gran Canaria , convocada a primera hora de la mañana, ha decidido rechazar el preacuerdo alcanzado ayer entre el comité de empresa y los representantes del Ayuntamiento capitalino, por lo que mantienen la huelga indefinida iniciada esta semana.

La reunión de ayer entre el concejal de Transportes, José Eduardo Ramírez; el director general de Movilidad, Heriberto Dávila, y el consejero delegado de Sagulpa, Octavio Cantero, finalizó con un principio de acuerdo, si bien los representantes del comité de empresa manifestaron sus dudas por la falta de garantías de la sociedad en relación con el incremento salarial del 1% y la inclusión en el sueldo del plus de productividad ligado a las multas.

El concejal de Ciudad de Mar y Movilidad, José Eduardo Ramírez, ha manifestado en un comunicado u sorpresa por la decisión de los trabajadores, ya que, según ha dicho, "el documento recoge las reivindicaciones planteadas" por el colectivo.

"No entendemos cuál es el desacuerdo ahora. Les hemos escuchado y hemos accedido a sus peticiones, sin embargo, para nuestra sorpresa, nos encontramos esta mañana con que la huelga se mantiene y no aceptan la propuesta", ha referido.

Según el edil, se "ha hecho un gran esfuerzo para que los trabajadores recuperaran los derechos laborales que les quitó el Partido Popular en el pasado mandato y, además, se ha planteado una subida salarial a los trabajadores de Sagulpa con menor remuneración", por lo que, a su juicio, "es sorprendente que un acuerdo que va más allá de lo inicialmente planteado haya sido rechazado".

"Los primeros sorprendido somos nosotros, anoche parecía que la propuesta iba a ser aceptada, pero hoy nos encontramos que no es así y desconocemos la razón de este nuevo bloqueo. Les hemos hecho recuperar los derechos perdidos y nos parecía que era muy buen acuerdo y así lo manifestaron ellos también anoche. Nosotros somos gente seria y lo que firmamos lo cumplimos", ha añadido.

No obstante, el edil ha asegurado que "por parte del Ayuntamiento la negociación no se cierra" si bien quiere "conocer la posición de los trabajadores, porque ahora la desconoce".

"Hemos hecho un esfuerzo y ahora la pelota está en el tejado de los trabajadores", ha aseverado.

Ramírez ha precisado que el documento recoge la subida salarial del 1 por ciento a partir del uno de enero de 2016 para todos los empleados, salvo para los controladores de la zona azul, cuyo incremento sería del 10 por ciento sobre el salario base a partir de la misma fecha, y del 5 por ciento a partir del 1 de enero de 2018, vinculado a la supresión de la productividad y el plus de subrogación actual.

Además, la propuesta indica igualmente la recuperación de las ayudas escolar y médica y reconoce una jornada laboral de 37,5 horas semanales.

El Ayuntamiento ha accedido también a aumentar a seis los días de asuntos propios, tal y como exigían los trabajadores, y a revisar el sistema de clasificación de categorías, eliminando la última del actual convenio en los grupos II y IV y manteniendo la del grupo III, afirma.

Otros de los aspectos que se indican es la disposición a pactar la preferencia de aumento de jornada para los tiempos parciales en caso de vacantes o necesidad, la suscripción de una bolsa de trabajo y el compromiso de favorecer la estabilidad laboral, especialmente en los contratos temporales. Además, se establece una vigencia del convenio colectivo hasta el 31 de diciembre de 2019.

Las partes acordaron anoche que esta propuesta de acuerdo se mantendría únicamente asegurando la desconvocatoria de huelga de los trabajadores, de lo contrario, sería retirada.

Aunque al término de la reunión de anoche las expectativas eran buenas, esta mañana, tras la asamblea celebrada por los trabajadores, los mismos han retomado sus manifestaciones y no han desconvocado la huelga.