Un surfero se rompió un brazo a principios de mayo al chocar con restos de los muros y pozos de la antigua fábrica de la Cicer. Pedro, que así se llama el deportista, terminaba ya su jornada de surf y había llegado a la orilla con la última ola. En ese momento y al ir a quitarse la amarradera, fue arrastrado por una espuma y se dio el golpe que le fracturó el brazo por tres sitios diferentes.
El accidente ocurrió justo frente al puesto de la Cruz Roja de esta parte de la playa de Las Canteras.
Pedro es autónomo y ha tenido que cerrar su negocio mientras se recupera. El surfero ha puesto el caso en manos de abogados, para estudiar la posibilidad de pedir responsabilidad patrimonial al Consistorio por lo sucedido. Considera que la administración es responsable de poner en peligro a los bañistas, por no retirar los restos de la antigua fabrica que emergen a la superficie cuando las mareas mueven la arena.
