La visita realizada ayer por la ministra de Fomento en Funciones, Ana Pastor, al Valle de Jinámar terminará con una denuncia del Cabildo de Gran Canaria ante la Junta Electoral Central. La razón esgrimida por la corporación insular es que la supervisión de los trabajos de rehabilitación y reforma de 480 viviendas en el barrio es un acto electoralista disfrazado de evento del Partido Popular con los vecinos. De momento, el gabinete de Antonio Morales pone en manos de los servicios jurídicos de la institución el estudio de la denuncia.
Además, la corporación insular manifiesta su malestar por la falta de "deferencia institucional" protagonizada por Pastor al no invitar al recorrido a representantes de las otras administraciones públicas -Cabildo, Gobierno de Canarias y Ayuntamiento de Telde- que también aportan fondos para esta segunda fase de los trabajos, presupuestada en 5.062.809 de euros y una duración de 18 meses. De hecho, el Estado aporta 1,6 millones de euros, 200.000 euros más que el Cabildo y el Ayuntamiento de Telde, mientras que el Ejecutivo regional invierte 400.000 euros. El proyecto, denominado Área de Rehabilitación y Restauración Urbana (ARRU) pretende modernizar los bloques de edificios del Valle de Jinámar en los próximos años.
Morales declaró que el viaje de la ministra, que también visitó el Puerto de La Luz y Las Palmas, "sí que es un acto puramente electoral con la descortesía de no invitar a todas las partes que cofinancian este proyecto, el Ministerio hace un uso partidista de un recurso público para hacer política de partido".
Una visita para oír a los vecinos
El Partido Popular (PP) anunciaba la presencia de Pastor como un acto de partido, según manifestó ayer Sonsoles Martín, concejala y presidenta de los populares en Telde, argumento compartido por la presidenta insular, María Australia Navarro, integrante del séquito que acompañó a la ministra.
Sin embargo, desde Nueva Canarias en Telde no se tenía muy claro que solo fuera un encuentro con los vecinos para ver las obras y preguntarles su opinión, ya que en la nota remitida a los medios se especificaba que "la ministra de Fomento del Gobierno de España, Ana Pastor, visita las obras de la segunda fase del Área de Renovación Urbana (ARU) de Jinámar, donde el Ministerio de Fomento ha invertido 1,6 millones de euros para la rehabilitación de 480 viviendas".
Además, el presidente regional de la formación conservadora, Asier Antona, María Australia Navarro, el diputado Guillermo Mariscal, la candidata al Congreso, María del Carmen Hernández Bento, el candidato al Senado, Poli Díaz y otros miembros del Partido Popular acompañaron a la titular de Fomento a observar los trabajos en tres edificios y a sus posterior conversación con los residentes del barrio en un bar junto a la oficina que la sociedad municipal Fomentas tiene en la zona, pero por donde solo pasaron por la puerta. Y eso que es el centro neurálgico de información de los trabajos.
Pero este recorrido -de partido para los organizadores y electoralista para los detractores-, además de las quejas del Cabildo, también las ha tenido de la plataforma Ciudadanos x Jinámar. Su portavoz, Sary Alejo, denunció ayer "la falta de escrúpulos del Partido Popular realizando una visita oportunista a las obras de rehabilitación en Jinámar. El Partido Popular y la señora Ana Pastor no pueden sacar pecho con estas obras en las viviendas de Jinámar dado que es una deuda histórica con los vecinos y vecinas de este barrio".
Alejo enfatizó en que "la necesaria rehabilitación de las viviendas de Jinámar no es ningún logro político, es una reivindicación histórica de los vecinos y vecinas que aquí vivimos y una deuda histórica de todas las administraciones", al tiempo que no dudó de tachar de electoralista el recorrido.
"El dinero no viene aquí"
La visita, que se adelantó en 30 minutos al horario previsto, fue un paseo ligero por el exterior de los tres bloques que se rehabilitan en estos momentos -196 pisos en total-, en los que los obreros realizaban su labor entre andamios y mallas de protección. El cortejo no tardó mucho en echar el vistazo para escuchar durante una media hora a los vecinos en un bar cercano.
Allí, la ministra y el resto de representantes populares oyeron las quejas y protestas de los residentes, casi todas con u n denominador común: el dinero para Jinámar no llega al barrio, se desvía. Una aseveración que Pastor, sentada e una esquina del local, respondió que el Ministerio ha entregado el dinero que debe aportar y remitió a Sonsoles Martín, concejala de Telde, como receptora de las alegaciones vecinales para que las lleve al Ayuntamiento y reclame actuaciones y respuestas a ellas.
Asimismo, la ministra indicó que su visita al barrio era también para conocer las inversiones del futuro, "para que en el próximo Plan de Viviendas se aborden los problemas más importantes que hay en la urbanización, porque en todos los sitios no son los mismos y lo que hemos hecho es determinar lo que es necesario".
