Más de 770 vecinos de Las Palmas de Gran Canaria han solicitado ya al Ayuntamiento la ayuda sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), cuyo plazo se abrió el pasado día 4. La iniciativa del tripartito, que ha sido criticada por los grupos de la oposición por no incluir entre los requisitos de solicitud la renta de las familias, tiene como objetivo contribuir a paliar la economía de aquellos residentes que peor lo han pasado durante la crisis. El Consistorio ha destinado para ello una partida económica de 1,7 millones de euros.
Hasta el pasado viernes, a las 13.00 horas, 778 personas habían entregado ya en el registro municipal la solicitud para acogerse a esta ayuda económica, en la que según los cálculos municipales podrían beneficiarse unas 26.000 familias de la ciudad.
Para ser beneficiario de esta subvención, que se otorga respecto al IBI de este año, hay que ser propietario de una vivienda habitual de un valor catastral inferior a 30.000 euros o haber recibido en ese periodo una ayuda de emergencia o de domicilio. También se incluye a aquellos que residan en régimen de alquiler en una vivienda pública del Gobierno de Canarias. Aunque en este caso, la compensación se otorgará sobre el IBI del próximo año.
El primer vecino que ha optado a esta subvención ha sido un residente del barrio de Las Rehoyas, aunque entre los más de 700 solicitantes figuran también habitantes de La Feria, Schamann, la Vega de San José, La Isleta, Ciudad del Campo, Cruz de Piedra, Las Torres, El Batán y La Paterna, entre otros.
En los primeros días en que comenzó el plazo de solicitud, que está abierto hasta el próximo 30 de septiembre, apenas hubo solicitudes. Hasta el pasado viernes, día 8, había unas 200 peticiones, pero en la última semana se han multiplicado hasta alcanzar la cifra de 778.
La ayuda fue aprobada en el pasado pleno municipal del 30 de junio sin apenas dar opción a los partidos de la oposición a que cuestionaran la medida ya que fue presentada en comisión minutos antes de ser votada en las Casas Consistoriales.
El Partido Popular (PP), Unidos por Gran Canaria (UxGC) y Ciudadanos (C's) se abstuvieron en el pleno y alguno de ellos ya ha anunciado que presentará alegaciones a la propuesta. El plazo para la presentación de alegaciones finaliza a mediados del próximo mes.
Un coladero sin la renta
En líneas generales, la principal crítica que hace la oposición a esta iniciativa social del Ayuntamiento es que las ayudas se otorgan a las personas y no a los inmuebles. Y que si no se tiene en cuenta la renta económica de las familias en la solicitud es muy probable que la estén solicitando personas que no lo necesiten, pero que cumplen con alguno de los requisitos. Como el de tener una vivienda por valor catastral inferior a 30.000 euros o que simplemente haya solicitado una ayuda a domicilio por unas horas para atender a una persona mayor o con discapacidad. Por lo que la ayuda servirá de coladero para algunas familias.
La posible picaresca que puede generar no parece importar al tripartito ya que, por encima de ello, está el valor que tiene para muchas familias necesitadas. Así lo manifestó la concejala Encarna Galván, encargada de justificarla ante el pleno municipal.
La subvención puede ser del 100% para aquellas personas que vivan en un piso con un valor catastral inferior a 10.000 euros y de un 80% en el caso de que esté situada entre un valor catastral entre 10.001 y 15.000 euros. Para los que tengan una vivienda con un valor entre 15.001 y los 20.000 euros, el porcentaje es del 60%. Y para los que pasen de esta cifra hasta los 30.000 euros se les compensará con tan solo 50 euros.
Envío de cartas
El gobierno municipal ha repartido ya 30.000 cartas entre los vecinos de la capital susceptibles de cumplir con los requisitos para que se acojan a esta ayuda económica, que se descontará en el mismo recibo del IBI. Es decir, no se les ingresará a los vecinos ninguna cantidad en el banco, sino que pagarán menos en el recibo.
En el caso de aquellas familias que hayan optado por el pago fraccionado y se acojan a esta subvención, el Ayuntamiento les devolverá el dinero que hayan pagado de más.
El Consistorio estima que una familia que viva en un piso con un valor catastral inferior a 10.000 euros y que paga de IBI una media de 67 euros anuales podría no tener que pagar nada si solicita la ayuda y resulta beneficiada. Mientras que los que residen en una de entre 10.001 y 15.000 pasarían a pagar tan solo 20 euros, en vez de los 100 que suelen pagarse de media.
En el caso de tener una vivienda entre 15.001 y 20.000 euros, la compensación del 60% sobre el IBI permitiría a la familia ahorrarse en torno a unos 54 euros sobre los 134 euros que habitualmente se abonan.
Los vecinos que quieran optar a esta ayuda solo tienen que presentar una solicitud, que pueden recoger tanto en la Oficina de Atención al Ciudadano, como en las Oficinas Municipales, así como en juntas de distrito o a través de la página web www.laspalmasgc.es.
