La Isleta sigue este fin de semana de fiestas, en honor a Nuestra Señora del Carmen. La celebración de la romería y la procesión marítima, que tendrán lugar hoy y mañana respectivamente, contarán con restricciones de tráfico.
Hoy se celebrará una romería entre las 18.00 y las 22.00 horas que partirá de la explanada de El Sebadal para recorrer las calles de Roque Nublo, Palmar, Tirma, Plaza Ferret, Majadilla, Arauz, Osorio, Artemi Semidán, Guayedra, Tanausú, Umiaga y Benartemi.
Durante el horario del evento estas calles estarán cerradas al tráfico por dispositivos de la Policía Nacional. Estará prohibido circular por las vías del recorrido desde las 23.00 horas del viernes hasta las 23.00 del sábado. Debido a la celebración de la procesión marítima al día siguiente, la calle Benartemi prolongará la prohibición de aparcar hasta las 18.00 del domingo.
Con motivo de dicha procesión, la Policía Nacional desplegará un nuevo dispositivo de tráfico desde las 11.00 hasta las 16.00 horas de mañana. La celebración de la procesión marítima afectará a las calles Benartemi, Juan Rejón e incluso a la Autovía Marítima en su llegada a la rotonda de Belén María. Estas vías estarán cerradas al tráfico para garantizar el recorrido de la comitiva hasta el recinto portuario. Los devotos volverán a realizar el camino hasta la parroquia de la calle Benartemi tras el embarque de la virgen en el Muelle Primo de Rivera.
Aviso a los viajeros
La Policía Local ha publicado varios avisos durante la semana para que las personas que hayan planificado coger un barco este domingo en el Puerto de la Luz, tengan en cuenta el cierre temporal del acceso al recinto portuario por Belén María y acudan con la antelación suficiente.
El siguiente domingo tendrá lugar la procesión terrestre tras la misa cantada,que comenzará a las 16.30 horas, y en la que está prevista la actuación del grupo musical Los Sancochos.
La subida de la imagen de la Virgen a su camarín tendrá lugar al día siguiente a las 18.30 horas y las fiestas se clausurarán el martes 2 de agosto con la celebración de una misa por todos los difuntos de la parroquia.
