El Partido Popular tildó ayer de "error" que el Ayuntamiento pague las facturas que dejó a deber el exalcalde, Juan José Cardona, a Emalsa e instó a recurrir la sentencia del TSJC que sostiene que, para cobrar, la empresa no tiene la obligación de justificar los trabajos de mantenimiento en la red de alcantarillado y saneamiento que realizó en el municipio entre 2013 y 2015. Al entender de los populares, el pago, en esas condiciones, creará precedentes en el Ayuntamiento al permitir a los proveedores cobrar por sus servicios sin necesidad de que presenten justificantes. Ante esto, el portavoz de PP, Ángel Sabroso, acusó al tripartito de "plegarse a intereses" empresariales.
"Es una situación perversa para la administración el no recurrir la sentencia; no había certificación del trabajo hecho. Que lo haga el PSOE no me llama la atención pero sí sus compañeros de gobierno", dijo Sabroso, durante el debate que se generó entre gobierno y oposición sobre el pago de las facturas a Emalsa y para el que hubo que votar una modificación de crédito, que a pesar de las protestas, fue aprobado con los votos del equipo de gobierno y de Unidos por Gran Canaria.
La deuda de Emalsa asciende a 15 millones de euros y el dinero para abonarla se sacará de los 31 millones de remanentes que ha obtenido el municipio tras la liquidación de las cuentas de 2015. Es la mayor modificación de crédito que ha presentado nunca una corporación en Las Palmas de Gran Canaria y que también servirá para pagar otra deuda con el Cabildo de Gran Canaria por el vertedero de Salto del Negro, a Geursa y otros proveedores y para más de un centenar y medio de obras de interés para la ciudad.
"Es una cuestión de principios el no pagar a un proveedor que no presente documentación", sentenció Sabroso, quien defendió a su compañero Juan José Cardona, de las acusaciones de la concejala de Fomento, Inmaculada Medina, a quien le tocó explicar el por qué de la decisión.
"Son facturas que no se quisieron pagar y es responsabilidad del Ayuntamiento hacerlo", subrayó Medina, quien recordó que la negativa del PP a abonar las facturas obligó a su vez al Consistorio a contratar a dos empresas para que le dijera qué hacer. "También le dijeron que sí, que había que pagar, y no les interesó".
Sabroso, sostuvo que no se dejaron de abonar por capricho. "Cardona no pagaba no porque no quería, sino porque no había ningún técnico del Ayuntamiento que pudiera justificarlo porque no lo hacía la empresa", aclaró sin el jefe de la oposición presente. Quien fuera alcalde en el anterior mandato prefirió ausentarse del pleno a media mañana, una vez hubo defendido una de las mociones que los populares presentaron en el pleno sobre la conveniencia de instar a Gobierno regional a asumir la prefinanciación de la Circunvalación.
Lectura de vacaciones
La portavoz de Ciudadanos, Beatriz Correas, por su parte, también mostró su disconformidad con pagar a Emalsa "cuando hay un informe de la Intervención General de enero 2014" que le dice que no hay que hacerlo. "No han pedido los informes y aún así han firmado las facturas sin aportar documentación. Al firmar han hecho bueno el contrato con Emalsa", espetó.
Y en su segunda intervención, tras recomendarle la edil Medina que se llevara el libro del ciclo del agua como lectura de vacaciones, subrayó. "Emalsa puede haber hecho los servicios, pero el problema es saber cuánto nos han facturado".
La concejala de Unidos por Gran Canaria, Ángeles Batista, por su parte, explicó que apoyaba la propuesta porque "el contrato, sea bueno o no, hay que pagarlo". Y recordó que de no llegar a un acuerdo con la empresa, además de los 15 millones, estaban abocados a hacer frente a los 1,5 millones de intereses que ha generado la deuda.
