El nuevo carril guagua que hará el Ayuntamiento en Siete Palmas, para conectar la rotonda de Hipercor con el Hospital Juan Negrín, por Felo Monzón y la avenida Juan Carlos I, en sentido bajada, ha provocado ya las críticas de los comerciantes de la zona y también de la Federación de Importadores y Distribuidores de Automóviles (Fredica). La instalación del nuevo carril bus cuenta con una inversión de 273.873 euros y tiene que estar terminado antes de que acabe el año.
El de Juan Carlos I será el segundo carril preferente con el que cuenta Guaguas Municipales en la zona, que ahora tiene sólo el de la subida de la avenida Felo Monzón, que se implantó durante el mandato de Jerónimo Saavedra. Ese carril provocó también en su momento las críticas de los comerciantes y del Partido Popular, que se quejaron de que la plataforma preferente de las guaguas eliminó muchos aparcamientos. Cuando el PP llegó al poder en el mandato pasado se mantuvo el carril, que ya se había consolidado, y no se produjo ninguna crítica más al respecto.
Ahora, la Asociación de Empresarios y Profesionales Bulevar Siete Palmas le ha declarado la guerra a este nuevo carril guagua y asegura que que esta actuación "perjudica seriamente" al pequeño comercio y "pretende acabar" con el tejido empresarial de la zona. Según los empresarios, la nueva plataforma de paso exclusivo traerá consigo la destrucción de 200 plazas de aparcamiento y la eliminación de las zonas de carga y descarga. La asociación ha iniciado ya la recogida de firmas en contra de este carril.
Parecidos argumentos esgrime la Federación de Importadores y Distribuidores de Automóviles, que eleva a 250 las plazas de aparcamiento en superficie que desaparecerán. A juicio de Fredica, el nuevo carril exclusivo "no tiene ningún sentido", porque "el recorrido y la zona no presentan ningún problema de tráfico, salvo en los casos puntuales de determinadas fechas navideñas y cuando se producen acontecimientos deportivos". Fredica advierte de que la medida puede resultar "peligrosa" para peatones y conductores, porque se "plantea establecer el recorrido de las guaguas en sentido contrario al de la circulación de vehículos".
