Javier Doreste, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento capitalino supervisó los trabajos que el Consistorio lleva a cabo en la calle Álamo, del barrio de San Nicolás. La intervención consiste en la construcción de un muro de contención de 100 metros de longitud y siete de altura, que permita urbanizar una vía que se encuentra cerrada al tráfico debido al peligro que supone el estado del antiguo muro en el que se produjeron varios desprendimientos como consecuencia de las lluvias caídas en la capital el pasado año. La obra, que pertenece al Plan de Cooperación del Cabildo 2016 y cuenta con un presupuesto de 399.477 euros (165.903 euros para este año y 233.574 para 2017), mejorará la accesibilidad en la parte baja del barrio gracias a la urbanización de la vía que será pavimentada. También se ampliarán las aceras ocho metros y medio y se instalará una nueva barrera de seguridad con pasamanos y una nueva red de saneamiento y abastecimiento.