Eduardo Suárez Morales murió el 6 de agosto de 1936, fusilado por las tropas franquistas tras intentar la resistencia ante el golpe de Estado. El pasado 6 de agosto, tras 80 años de esa trágica muerte, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria mostró su compromiso con sus familiares para honrarle, intentando que parte de la ahora plaza de La Puntilla pase a denominarse como plaza del Diputado Eduardo Suárez.

La zona elegida será la prolongación de la calle Prudencio Morales hasta el restaurante La Marinera en la zona de La Puntilla, donde se celebró el acto por el mítico sindicalista, que fue miembro en Cortes por la isla de Gran Canaria en la última legislatura de la Segunda República (desde febrero de 1936 hasta el golpe de julio del mismo año). Ese espacio tiene un gran valor para sus familiares, puesto que allí, tanto él como su padre se dedicaron a dar clases a los obreros del Puerto con el objetivo de enseñarles a leer y escribir para que sus jefes no les engañaran con los contratos.

El homenaje estuvo organizado por el Consejo Asesor de la Memoria Histórica de la capital, y en él participó, entre otros, el Primer Teniente de Alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Javier Doreste. El concejal transmitió a familiares y asociaciones su enhorabuena por el trabajo que han llevado a cabo estos años porque su insistencia es la presión que necesitan las administraciones para llevar a cabo este tipo de iniciativas. Con Doreste iniciarán las conversaciones este mismo jueves con el objetivo claro de lograr no solo el nombre de una plaza, sino también una estatua conmemorativa.

Para Isabel Méndez, nieta del homenajeado y presidenta de la Asociación Eduardo Suárez Morales por la Recuperación de la Memoria Histórica, "el acto fue muy emotivo" por la calidad y cantidad de aportaciones de los distintos invitados. A su vez, considera que en todo homenaje a la memoria histórica y a su abuelo en particular, "la afluencia de gente, sea cual sea, es muy bienvenida". En este caso, unas 100 personas acudieron a La Puntilla a conmemorar el aniversario de la muerte del diputado.

Fue momento, también, para lamentar que su abuela y su madre hayan muerto "sin poder ver ese reconocimiento, que era algo que teníamos como objetivo en la asociación desde hace mucho tiempo". Sin embargo, "la lucha continúa", como ella misma afirmó, y no van a parar hasta que se dé a conocer "la figura de Eduardo Suárez" y hasta que se produzca "la anulación del juicio sumarísimo" y se reconozca "que lo que se le hizo fue una injusticia sin paliativos".