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Educación Cuatro décadas de dedicación

Corea, al alcance de todos

El Colegio Coreano de Las Palmas cumple cuarenta años de vida

Alumnos del Colegio Coreano de Las Palmas en una excursión a la Finca de Osorio en mayo de este año. LA PROVINCIA / DLP

En 1976 nació en la capital grancanaria una institución que buscó educar en la cultura y la lengua coreana a las decenas de hijos de la comunidad del país asiático que habitaban en aquella época en la capital. A día de hoy, y 40 años después, el Colegio Coreano de Las Palmas se ha convertido en un referente de la enseñanza de la historia y lengua de Corea del Sur a nivel internacional.

Kilsun Kim es una de las docentes que imparten clase en el centro, y lleva en la Isla poco más de un decenio. Para ella, la institución a la que representa "ha aportado mucho a los niños coreanos que han crecido aquí", ya que no solo les ha hecho capaces de desenvolverse en su propio idioma a pesar de encontrarse a unos 12.000 kilómetros de su país natal, sino que también les ha educado en la idiosincrasia de sus compatriotas, en su historia y en su sociedad. Todo ello, apunta Kim, "les da una mayor confianza sobre el conocimiento de lo coreano, y les aporta un mayor acceso a la Educación Superior en Corea del Sur". Según afirma, el Colegio Coreano de Las Palmas ha conseguido que muchos de sus alumnos entren en las mejores Universidades del país sin excesivo esfuerzo.

Eso sí, y como recalca Kim, el centro nunca podrá realizar una formación completa, que tendrá que ser reforzada en las casas de los alumnos. "Las familias de la comunidad coreana de Las Palmas son muy estables porque las madres se quedan en casa y pueden complementar la enseñanza del idioma", explica.

Aunque la idea inicial del centro fue reforzar el idioma y la cultura coreanas a los propios menores coreanos, desde el año 2.004 se imparten también clases para extranjeros que quieran sumergirse en la lengua del país. Según Kim, esto se debe al "auge de la cultura musical y televisiva de Corea, que ha atraído la atención de muchos occidentales". "Cada año, tenemos más alumnos que estudian coreano y, para iniciar el curso 2016/2017, tendremos cuatro clases, una más que el pasado año escolar", añade con alegría. No es para menos, ya que para este mes de septiembre se espera la entrada de unos 15 alumnos más.

Pero, ¿cuál es la metodología que es utilizada en las clases de la escuela coreana? Kilsun Kim especifica que las lecciones son una mezcla de aprendizaje del idioma con aprendizaje de la sociedad y la historia del país. "La propia enseñanza del idioma ya mete al alumno en el conocimiento de nuestra vida social e histórica", recalca. Además del día a día, un par de jornadas al año los alumnos cambian los libros, bolígrafos y libretas por los calderos, cucharones y demás utensilios de cocina para impartir una clase de gastronomía coreana. "Es importante para ellos", continúa Kim, "que su enseñanza no se cimente, únicamente, en la gramática pura y dura sino que, a través de la pintura, de la música y de la gastronomía puedan profundizar y desenvolverse en entornos mucho más cotidianos".

Tal y como se ve en la fotografía que ilustra esta página, los alumnos del Colegio Coreano de Las Palmas también disfrutan de actividades al aire libre y de excursiones a diferentes puntos de la isla, con el fin de "estrechar lazos entre ellos" ya que muchos "solo coinciden en las clases de coreano". Pero a esas salidas no solo van los hijos de la comunidad coreana, sino también los canarios que aprenden su cultura en el centro.

A día de hoy, apunta la profesora, hay nueve clases: tres de ellas para los extranjeros que aprenden el idioma y seis de niños coreanos. Todas ellas están estructuradas en base al nivel de conocimiento de los alumnos, que se dividen en nivel básico uno, nivel básico dos y nivel intermedio. En total, 70 niños acuden al centro y nueve profesores se dedican a impartir la docencia, cifras que se han incrementado en los últimos tiempos.

El colegio no tiene un centro físico, sino que dan sus clases en un espacio cedido por el Gobierno de Canarias y el Ayuntamiento capitalino. Cada sábado, de nueve de la mañana a una de la tarde, los chicos acuden al CEIP Santa Catalina, en la calle Isla de Cuba de la ciudad. Por ello, "la comunidad coreana siempre estará muy agradecida, tanto a las instituciones como a los docentes del propio centro, por ceder totalmente gratis su espacio durante cada sábado", comenta Kilsun Kim.

Para el 40o aniversario de la misión del centro están previstas ciertas actividades que la comunidad docente y los alumnos están preparando "con mucha ilusión". Sin embargo, señala Kim, "todavía no sabemos si será en este nuevo curso 2016/2017 o iniciando el que viene, 2017/2018", por lo que habrá que esperar a cómo se desarrollen las cosas para poder celebrar, junto con la comunidad coreana de Las Palmas de Gran Canaria, que acerque la cultura del país asiático al alcance de todos los habitantes de esta ciudad.

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