El carguero Almawashi, de bandera panameña, dejó ayer una estela de olor nauseabundo a media mañana sobre la ciudad, cuando salía del puerto de Las Palmas de camino a Mersin, en la costa turca, a donde llegará el próximo día 5 de octubre. El buque-establo desprendía un olor a estiércol y a vaca, aunque iba vacío de animales. La embarcación fue construida para ser un petrolero en 1973, pero a principios de los años 80 fue transformado en un buque-establo con capacidad para 20.000 reses. El Almawashi llegó a la ciudad el sábado por la noche procedente de África. La última vez que arribó a Las Palmas de Gran Canaria fue el pasado 28 de julio.