La unidad de atestados y tráfico de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria ya ha identificado al conductor que se dio a la fuga en el atropello que se produjo la madrugada del domingo en la carretera de Las Torres a Tamaraceite, a la altura del barrio de Las Perreras, y que dejó sin vida en la cuneta a una mujer de 65 años identificada como Elisa Ruano Herrera y que era conocida como Libertad. Este periódico también ha podido saber que el vehículo con el que se produjo el atropello era una furgoneta Mercedes Vito y que el conductor es empleado de una funeraria.

Al conductor, natural de la capital grancanaria y que se encuentra detenido, se le tomó declaración durante unas dos horas de la mañana de ayer en la jefatura de Miller Bajo y el caso pasará a manos de la Policía Nacional. El juez que lleva el caso ha decretado secreto de sumario. La investigación la han llevado agentes de la unidad de atestados y tráfico de la Policía Local capitalina, así como la policía judicial de la Policía Nacional. Está previsto que el detenido pase hoy a disposición judicial a las nueve de la mañana.

Las fuerzas de seguridad ya habían iniciado la búsqueda el domingo por la mañana, tras el atropello por parte de este vecino de Las Palmas de Gran Canaria, al que se le investiga por un delito de homicidio imprudente y otro de omisión del deber de socorro a la víctima, que fue hallada junto a su bolso, si bien en el interior faltaba su cartera.

La noche del incidente, Libertad Ruano Herrera estaba regresando de la casa de una amiga que vive en La Galera, donde se encontraba disfrutando de una velada. A este domicilio la había llevado su hija en torno a las 20.30 horas del sábado, tal y como pudieron confirmar a este periódico fuentes cercanas a la familia.

La reunión finalizó sobre la una y media de la madrugada del domingo y, tras abandonar la casa de su amiga, acompañada por otras dos, cogió una guagua que la llevó hasta la zona de Hoya Andrea. Desde este punto se especula que Libertad Ruano pudo continuar a pie su trayecto, con la intención de llegar hasta su domicilio, situado en el barrio de Las Majadillas, relativamente cerca de allí.

Los servicios del Centro Coordinador de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias (Cecoes-112) recibieron en torno a las 8.00 horas del sábado un aviso del Cuerpo Nacional de Policía, después de que un ciclista, al pasar por la zona, se percatara de la presencia de una persona junto al arcén. Si bien en un principio se notificó el suceso a la Guardia Civil, finalmente fue el equipo de tráfico de la Policía Local de la capital el encargado de realizar el atestado, puesto que la carretera en la que ocurrió el atropello, es competencia del Ayuntamiento tras su municipalización.

La vía carece de aceras en la mayor parte de su recorrido y cuenta con arcenes muy estrechos, una cuestión de la que se vienen quejando los vecinos de la zona desde hace tiempo, además de por la falta de iluminación que tiene.

Traumatismo en la cabeza

Cuando se personaron los miembros del equipo médico, comprobaron que la víctima presentaba un traumatismo en la cabeza y sólo pudieron confirmar su fallecimiento. A partir de entonces, quedaron a la espera de que el juzgado de guardia procediera al levantamiento del cuerpo sin vida de la fallecida.

En el lugar del atropello se encontró una pieza de un coche que fue empleada para identificar el automóvil. Por su diseño, los investigadores ya pudieron determinar que se trataba de un vehículo de grandes dimensiones.

Las imágenes de las cámaras de seguridad cercanas, tanto de viviendas como de establecimientos, fueron también analizadas para buscar automóviles que coincidieran con la descripción. La familia, por su parte, hizo un llamamiento público a los vecinos para que aportaran cualquier dato que pudiera arrojar luz sobre el caso.