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Bolardo trampa en Guanarteme

Varios vecinos del barrio han sufrido graves caídas

Un peatón a punto de cruzar entre los separadores del carril bici de la calle Secretario Padilla.

Si el Ayuntamiento se llega a descuidar se encuentra a medio barrio de Guanarmete lisiado. El motivo son las "cucarachas", como llaman los vecinos a los separadores que se han colocado para separar el carril bici, y que han causado más de un disgusto en la zona. Y es que el color negro que tienen estas estructuras se mimetiza con el del asfalto, sobre todo por la noche, por lo que muchos residentes se han dado cuenta de su presencia cuando ya estaban de bruces en el suelo. Una situación ante la cual el Consistorio capitalino tiene intención de actuar a partir de la próxima semana, dándole un tono más reflectante a estos delimitadores, según informó el director general de Movilidad, Heriberto Dávila.

El vecindario, representado por Pepi González, mantuvo una reunión ayer con Dávila, así como el técnico de la concejalía, Marcos Infante y el edil del distrito, Sergio Millares. El objetivo era abordar un problema que tiene en pie de guerra a los que viven cerca de las calles Secretario Padilla y Pavía y sus alrededores. En ellas, han sido varias las personas que se han ido directas para el piso después de tropezar con alguno de los más de 40 "bolardos" negros que se reparten a lo largo de la calzada hasta Numancia.

"Catalina, una vecina se cayó y, además de tener que darle ocho puntos, perdió dos dientes", explica González acompañada por otra de las afectadas, Elisa Mederos Rodríguez, quien confiesa haberse tropezado en numerosas ocasiones porque no se distinguen bien de la carretera. La representante vecinal recuerda con angustia también el caso de un señor de 80 años, residente de la zona, al que también tuvieron que dar otros tantos puntos y se fracturó la nariz por un accidente similar. Un testigo directo de numerosas caídas graves como las relatadas por las dos mujeres, es Carmelo López, quien ha salido corriendo de su bazar en varias ocasiones para ayudar a levantarse a los damnificados. "La semana pasada recogí a dos y las anteriores a otros tantos", cuenta quien cree que los separadores algo "muy peligroso tanto para jóvenes como para mayores". Por ello, el tendero ve estas estructuras "un estorbo más que otra cosa".

Esto, junto con el temor que muchos sienten a ser atropellados por los ciclistas que, según cuenta Pepe González, van muchas en sentido contrario al del carril", son las preocupaciones que los vecinos le hicieron saber ayer al director general de Movilidad. "Primero escuchamos lo que nos querían transmitir y después les enseñamos imágenes de otras ciudades españolas y europeas donde también se han colocado estos separadores. De todas las opciones nosotros elegimos lo menos intrusivo", comenta Heriberto Dávila, quien se ha comprometido a cambiar el color de los delimitadores, que pasarán a ser amarillos con rayas blancas para facilitar su visualización. La colocación de las nuevas piezas se hará de manera progresiva. "La idea es ir colocando ocho y retirando otros tantos hasta que se hayan cambiado todos", arguye quien recuerda que el objetivo de estas estructuras el reducir la velocidad de los coches. "Los vecinos aseguran tener miedo de ser atropellados por las bicicletas, pero es una zona 30 hay que hacer hincapié en que son los vehículos los que tienen que reducir la velocidad".

Para mejorar la circulación en la zona se va a proceder además a instalar pequeñas farolas en la calle Secretario Padilla donde los vecinos también han pedido una barandilla en la esquina con Cayetana Manrique para evitar que más coches se estampen contra la vivienda que hay en ese lugar. Según González, Dávila también se comprometió "a hablar con Vías y Obras para poner un paso de peatones en la calle Simancas, a la altura de la famarcia". La presidenta vecinal afirma que, tras la reunión, están algo más animados pero a la espera de ver cómo funcionan las nuevas medidas. De todas formas, dentro de 15 días, la asociación tiene previsto reunirse de nuevo con el técnico de Movilidad y con el servicio de Bybike LPA para crear un consenso colectivo que mejore la movilidad en Guanarteme.

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