El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria procedió ayer a retirar la escultura Juguete del Viento, del artista lanzaroteño César Manrique, de su ubicación original en un extremo de la plaza de La Puntilla, para proceder a su restauración y reparación. Esta escultura, adquirida por el Ayuntamiento en 1991 e instalada junto al mar en 1995, se encuentra seriamente deteriorada por la erosión marina en sus componentes metálicos que han provocado la oxidación de la mayoría de las 52 piezas que la componen.

El servicio de Mobiliario Urbano, dependiente de Fomento y Servicios Públicos, ha decidido actuar de manera preventiva ya que algunas de las 52 piezas que conforman la pieza escultórica ya se habían partido y caído debido a la corrosión del metal.

Debido a que la oxidación impide girar a las piezas como estaba previsto en su diseño original, el viento también estaba afectando a la estabilidad de la escultura y por eso se ha optado por el desmontaje inmediato.

Para desmontar el Juguete del Viento el Ayuntamiento ha contratado a una empresa especializada que con una grúa de gran tamaño ha desmantelado esta compleja escultura de 9,70 metros de alto por 5,76 de ancho.

La obra de Manrique se trasladará hasta el taller de la empresa contratada por el Ayuntamiento donde se le realizará una restauración integral con el desmontaje de todas sus piezas y los rodamientos que hacen girar los brazos del Juguete del Viento como si fueran las aspas de un molino. El Ayuntamiento restaurará las piezas rotas con otras nuevas revestidas con fibra de vidrio y se aplicará al resto de partes metálicas productos reparadores y conservantes.

El Juguete del Viento ya ha sido sometido en 2010 y 2013 a tareas de rehabilitación por el Ayuntamiento debido al serio deterioro que sufren sus piezas de metal ante la exposición continuada durante dos décadas al aire marino y al viento en esta zona del litoral capitalino.