Un empresario se ha querellado contra el vicepresidente de la Cooperativa Farmacéutica Canaria (Cofarca), Juan Ramón García-Lisón, por falsear supuestamente un acta de la sociedad Nutrición Clínica Genérica (hoy Adventia Healthcare) para echarlo del negocio.

El socio perjudicado por la maniobra para reducir su capital en la empresa, Miguel Rafael Perdomo, también se ha querellado contra los administradores Alfonso Miguel Almeida Garatachea y José Javier Díaz Ortega. Les acusa de falsificar el acta que acredita la celebración de la junta, pero el Juzgado de Instrucción número 4 de la capital, tras tomarle declaración a los denunciados, archivó la investigación al no apreciar indicios delictivos en la actuación de los directivos de Nutrición Clínica Genérica. La empresa se dedica al suministro de productos de nutrición.

El juez instructor concluye que no hay voluntad de engañar porque "se preveía celebrar" la junta para "llevar a efecto el contenido de un acuerdo marco de forma subsiguiente e inmediata" a la firma de ese acuerdo, esto es, el mismo día 15 de julio de 2014, como "aparentemente sucedió", recoge el auto de archivo. Sin embargo, Perdomo ha recurrido el sobreseimiento de las diligencias y ha solicitado a la Audiencia de Las Palmas que reabra la investigación.

El abogado del empresario insiste en que la junta no se celebró ese 15 de julio de 2014, sino que se falseó la lista de asistentes y la certificación del acuerdo para luego inscribirlo en el Registro Mercantil. El letrado tiene en su poder mensajes de teléfono y billetes de avión que acreditan la ausencia de uno de los administradores en dicha asamblea.

Se trata de Almeida Garatachea, que tenía un poder de representación para negociar los acuerdos en nombre de Perdomo. El denunciante asegura que Almeida nunca pudo defender sus intereses en esa reunión porque estaba en Madrid subiéndose al avión a la misma hora a la que supuestamente comenzó la junta.

Perdomo se siente "engañado" porque utilizaron de "cebo" sus honorarios como director comercial para convocar la junta, entre otros acuerdos como el cese de administradores o el cambio de estatutos. Finalmente se eliminó la minoría de bloqueo que Perdomo tenía como titular del 40 %. El resto se lo reparten Díaz y García-Lisón a través de la sociedad Vising Invest.

Luego, en marzo de 2015, tras eliminar el veto de Perdomo mediante la inscripción en el Registro Mercantil de la junta supuestamente falseada, aprobaron una ampliación de capital por compensación de créditos, sin derecho de suscripción preferente, hecha a medida de Adventia Nutrition & Solutions, que es propiedad de Díaz. Con esa operación redujeron la participación de Perdomo al 5 %, según el denunciante.