El Auditoria Alfredo Kraus se viste de gala para despedir 2016 a lo grande, con un cena de lujo con vistas al mar y una fiesta amenizada con jazz en vivo para entrar felices en 2017, explica el director de la Fundación Auditorio y Teatro, Tilman Kuttenkeuler. Es la primera vez que el Alfredo Kraus pone su vestíbulo, su terraza y su solemnidad musical al servicio del Año Nuevo, una "oportunidad única" para confraternizar en un lugar "especial", a los pies del océano Atlántico y de la playa de Las Canteras, en palabras de Tilman.
Y es que el vestíbulo del Auditorio se transformará en un salón restaurante, con mesas para ocho o diez comensales que podrán acoger en total a 250 personas como máximo. Para la fiesta posterior se esperan entre 500 y 700 asistentes, añade el director de la Fundación.
La idea es disfrutar de una "buena comida" con actuaciones en vivo y luego, alrededor de la media noche, contemplar desde la terraza los fuegos artificiales que iluminarán el mar y el cielo de Las Canteras. Media hora después, como marca la tradición, empezará la fiesta de Fin de Año en la Sala San Borondón.
Las entradas para la cena y el baile se venden por separado, aunque quien decida ir a cenar también puede sumarse al espectáculo de la Sala San Borondón. El festejo se prolongará hasta las 06.00 horas y contará con barra libre, cotillón, el directo de Los Lola a las 01.30 horas para ponerle un poco de rock a la cosa y un DJ hasta que el cuerpo aguante, con su "caldito" de amanecida como reconstituyente para terminar la primera noche del año.
La entrada para la fiesta cuesta 70 euros si se compra antes del 26 de diciembre y cinco euros más si se adquiere después de ese día, bien a través de las taquillas del Teatro y del Auditorio o mediante la web de la fundación. El precio para asistir a la cena y la fiesta es de 140 euros, con un incremento también de cinco euros si se compra la entrada pasado el día 26.
Y es que el menú y los actos previstos están a la altura del edificio creado por Óscar Tusquets. A las 21.00 horas el Dúo Jazz amenizará el cocktail de bienvenida, con brochetas de queso isleño con geles de fruta de la pasión, transparencia con mousse de foie y compota de cereza, cucharitas con crema de guacamole y langostinos, mini croquetas de jamón ibérico y gyozas de pollo con salsa de soja.
Luego, a las 21.45 horas, comienza la cena y actúa Cuarteto de Jazz, al tiempo que el humorista Paco Santana, de Piedra Pómez, ejercerá como maestro de ceremonias. Se servirá crema de langostinos con juliana de cangrejo y almendras tostadas, confit de pato con milhoja de papas y salsa de foie, semifrío de turrón de Jijona con salsa de avellanas, café expresso, turrones y mignardises.
Entre las bebidas habrá aguas minerales, vino blanco Emina y vino tinto Marqués del Puerto Crianza, además de barra libre de 21.00 a 03.00 horas, que es cuando finalizará la cena. Antes, a las 23.45 horas, la esperada copa de Champagne Mumm y las uvas, que se servirán en la Terraza Canteras para rendirse ante los fuegos artificiales de la ciudad.
Los comensales podrán pasarse a la Sala San Borondón para seguir la fiesta cuando quieran. La cena, en cualquier caso, también tendrá barra libre y DJ en el hall del Auditorio, al menos hasta que finalice a las 03.0 horas.
"Es la primera vez que organizamos una celebración en el Auditorio de este tipo. Hay que aprovechar porque en la capital no hay tantos lugares especiales para cenar en una noche como ésta", destaca Tilman Kuttenkeuler.
La fundación organiza la cena y la fiesta junto a Miguel Colorado Ramírez, responsable del festival de jazz, informa Tilman.
