La Asociación en Defensa del Árbol y del Paisaje de Gran Canaria (Adapa) ha critica la instalación de anillas en el tronco de algunas de las palmeras de la ciudad, que realiza la concejalía de Parques y Jardines para evitar el anidamiento de roedores en la copa de las mismas. Según la organización, la medida, además de no estar siendo efectiva, está creando un impacto paisajístico.

"Lo que inicialmente parece una medida oportuna, se convierte en una acción de verdadero impacto paisajístico cuando dicho anillado, en un tono rojizo, se plantea en un espacio uniforme", dice la asociación en una nota.

Adapa propone cambiar el color de dichas anillas, que están hechas de láminas de acero galvanizado atornilladas entre ellas para no afectar a los troncos de las palmeras, como ya se ha hecho en la ciudad de Valencia. En esta urbe del Mediterráneo, donde las palmeras son como en la capital protagonistas del paisaje urbano, se han colocado anillas de color marrón para evitar "el innecesario impacto paisajístico que ahora se está empezando a comprobar en Las Palmas de Gran Canaria".

El colectivo no entiende como las experiencias paisajísticas realizadas en otras ciudades "no se tengan en cuenta a la hora de desarrollar las mismas medidas en nuestro entorno". De momento, cientos de palmeras situadas en plazas y jardines de la ciudad ya tienen estas anillas de color rojo, que son perfectamente identificables a simple vista y que llaman la atención de los paseantes.

Gasto

La asociación indica que para evitar "el doble impacto inversor que tendría que realizarse ante una posible sustitución de las anillas, en un futuro más o menos cercano, se ruega la paralización de su instalación".

La medida de instalar anillas antiroedores comenzó el pasado mes de diciembre y la idea de Parques es instalarlas en 3.000 ejemplares de la ciudad para evitar que los roedores trepen por sus troncos y aniden en las copas de los ejemplares, alejados de las trampas que habitualmente instalan los servicios municipales para evitar que se conviertan en una plaga.

Las anillas ya instaladas pueden apreciarse perfectamente en el parque Romano, en la plaza de la Feria, y en el resto de jardines que están paralelos a la avenida marítima. La medida antirroedores se está aplicando sobre todo en aquellos parques y espacios públicos concurridos por personas y por niños. Según el Ayuntamiento es el método más eficaz para acabar con los ratones trepadores.