El hueco que dejó libre la carabela La Niña III en el parque del Castillo de La Luz, y que fue reubicada frente al Museo Elder en 2014, será acondicionado en unos dos meses, después de que Urbanismo haya licitado esta semana la obra, presupuestada en 140.710,88 euros e incluida en el Plan de Cooperación de 2017 del Cabildo insular. El proyecto prevé llevar la valla de acero cortén hasta Juan Rejón por la calle Doctor José Guerra Navarro, y la instalación de una plataforma para colocar una obra de Martín Chirino.
Con la reforma de este espacio se dará por finiquitada la remodelación de este parque urbano de La Isleta, que ha sufrido una importante transformación tras la rehabilitación de la fortaleza y su conversión en Fundación de Arte y Pensamiento Martín Chirino.
El acondicionamiento de este espacio público en una parcela con césped, plantas y árboles supondrá el cerramiento de los jardines por la calle Doctor José Guerra Navarro, aunque habrá una pequeña puerta de acceso para que los vecinos puedan entrar al mismo, o atravesarlo, sin necesidad de rodear el recinto hasta llegar a las dos entradas existentes. Una por la calle Juan Rejón y, otra, por Gordillo. Así lo indicó ayer el concejal de Urbanismo, Javier Doreste.
La parcela ocupa una extensión de 998 metros cuadrados, de los cuales 631 metros cuadrados se destinarán a un parterre de césped; 286,50 a caminos de circulación y accesos y 80,50 metros cuadrados a reposición de acera.
Socavón
La empresa que salga adjudicataria deberá también acometer el relleno con tierra del socavón donde se ubicaba la carabela, y que suponía un desnivel de unos dos metros con respecto al resto del parque.
Además de las infraestructuras necesarias para la recogida de aguas pluviales, la instalación de riego, así como de alumbrado público, electricidad y tráfico.
Doreste apuntó que el proyecto, que está programado para ocho semanas, está "consensuado con los vecinos" después de que se barajaran otras opciones como un parque infantil o un quiosco. Y también con los arquitectos -Fuensanta Nieto y Enrique Sobejano- que reconstruyeron la fortaleza para albergar la obra del escultor grancanario Martín Chirino- ya que habrá que retirar el cerramiento de planchas de acero cortén, correspondiente al lateral sur de la parcela y que está limítrofe con el recinto del Castillo, para sustituirlo por otro del mismo material pero cilíndrico y relleno de hormigón, similar al existente, que permita a los usuarios del recinto visualizar la fortaleza desde los jardines. En una esquina del solar habrá una chapa de acero cortén en la que irá el nombre del parque.
