El adolescente de 14 años que ha sido acusado de abusos a dos niños de 13 y ocho años ha sido internado en régimen cerrado en un centro terapéutico por orden de la Fiscalía de Menores, según indicó ayer la consejera de Política Social del Cabildo de Gran Canaria, Elena Máñez.

Ante un supuesto caso de abusos a menores en un hogar de acogida de la capital grancanaria ocurrido a primeros del pasado mes de febrero, Máñez ha dicho a los medios de comunicación que desde el momento que se detectó el presunto delito se puso en conocimiento de la Policía y se presentó denuncia.

"A partir de ahí, hemos estado trabajando con una unidad especializada de la Policía, se tomó declaración a los menores, la Fiscalía dictó una orden cautelar de internamiento en régimen cerrado y las dos presuntas víctimas son atendidas por un servicio especializado", precisó la consejera insular.

Elena Máñez puntualizó que el presunto agresor tiene 14 años y que las edades de las víctimas son de 13 y ocho, que "son unas edades que justifican que estuviesen conviviendo en la misma unidad", agregó.

"El caso está en manos de la Justicia, que será la que sentencie en base a los hechos que han sido denunciados y las declaraciones recogidas tanto a los menores como a los profesionales del centro", apuntó Máñez.

"En manos del Juzgado"

La consejera de Política Social pidió cautela -"el caso está en manos del Juzgado"- y recordó que el Cabildo de Gran Canaria cuenta con un protocolo de prevención y detección de casos de abusos sexuales que, en su opinión, "ha funcionado y se ha aplicado de forma inmediata desde que se produjo esta sospecha".

Así, en base al protocolo, la entidad que gestiona el centro en Ciudad Alta -la ONG Nuevo Futuro- ha actuado con la máxima celeridad en coordinación con el Gobierno de Canarias, Cabildo y Policía, especificó Elena Máñez.

La responsable insular de Política Social desveló que en estos casos basta que se dé un solo indicador para que se presente denuncia ante la Policía Nacional, que se encarga de iniciar el procedimiento de investigación y lo comunica a la Fiscalía, que acuerda las medidas cautelares.

Elena Máñez explicó que en esta casa de acogida, una de las tres de la ONG, había cuatro menores distribuidos en la misma habitación, ya que el modelo de trabajo en la red "es el de casas o pisos para que la convivencia sea la más parecida a la de una familia y, por eso, se atiende a tramos de edad comunes".