El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Javier Doreste, afirmó ayer que la Base Naval tiene que "devolverse" a la ciudad "a coste cero". El edil hizo estas declaraciones después de que el pasado miércoles la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, se comprometiera ante una pregunta del diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, a crear una comisión para evaluar el traslado del Arsenal, aunque alertó de su alto coste: 400 millones de euros.

Doreste acusó a la titular del departamento de especular con la tasación de la operación. "Ha puesto un precio de especulación, está valorando el suelo como si fuera residencial", declaró. Sobre quién debe financiar la reubicación de la Base Naval, el edil lo tiene claro: "No deberíamos de pagar nada porque ese es el antiguo muelle frutero -también conocido como Nuestra Señora del Pino-que fue requisado por los militares a raíz del golpe militar". "Eso era antes del Puerto y de la ciudad, y fue ocupado por los militares sin pagar un duro", por lo que, expuso, "no hay motivos para que tengamos que pagarlo nosotros".

Asimismo, el concejal de Urbanismo estimó que esa parcela propiedad de la Armada está actualmente sobredimensionada. "¿Una base tan grande es necesaria en este momento?", preguntó. Y añadió que en gran parte del espacio está destinado para el uso de otras instituciones como la Agencia Tributaria, que lo utiliza para el atraque de las patrulleras antidrogas; y la Guardia Civil. Doreste apostilló, además, que unas instalaciones militares en pleno centro de un ciudad son desaconsejadas por la OTAN.

Sobre el posible uso que se le pueda dar en un futuro a los más de 15.000 metros cuadrados de superficie que actualmente ocupa la Armada, el munícipe de LPGC Puede señaló que lo más propicio será un gran espacio libre que quede a disposición de toda la ciudad y que esté vinculado al Parque Marítimo, que conectará el Centro Comercial El Muelle con el Arsenal y cuya segunda y tercera fase está previsto que se empiecen a ejecutar a lo largo del presente año.

El edil también habló del espacio ocupado en La Isleta por el regimiento de infantería Canarias 50. En este sentido, Doreste sopesó que se podrían realizar compensaciones a través de la rehabilitación del edificio de la delegación de Defensa situado en el paseo de Las Canteras a cambio de liberalizar la península.

El alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo, también hizo referencia ayer al anuncio de Cospedal de crear un grupo de trabajo. "Es un paso adelante" para ver las posibilidades reales del traspaso, dijo. El regidor aseguró que este impulso dado por el Gobierno es "importante" porque se trata de un compromiso de la ministra. Hidalgo abogó porque la parcela pase a uso ciudadano y no portuario, como indicó Cospedal que ocurriría si se produce finalmente la reubicación. "La idea es que los ciudadanos no vean un muro cuando termina Mesa y López sino que tengan la posibilidad de acceder a todas sus costas", declaró. Y recordó que la ciudad tiene varios ejemplos de zonas militares recuperadas para uso civil, como el acuartelamiento de los paracaidistas de Las Rehoyas, que ahora es un parque, o el castillo de Mata, que se ha convertido en un museo.