Comisiones Obreras (CC OO) denunció ayer el peligro que han corrido los bomberos de la capital grancanaria durante las incursiones en las galerías de Los Nidillos en busca del origen de los vertidos de enterococos en El Confital, debido a la ausencia de una evaluación de riesgos y de un procedimiento de actuación claro, sin olvidar la falta de formación específica para realizar este cometido que padecen los agentes del Servicio de Salvamento y Extinción de Incendios (SEIS). Pero lo que el sindicato ha denunciado, sobre todo, es que el rastreo del origen de los vertidos no es competencia de los agentes.
"Los bomberos", resaltó Víctor Monzón, delegado de CC OO en el SEIS, "nos dedicamos a salvar vidas y al servicio de incendios, no a meternos de forma gratuita en un sitio, cuando el Ayuntamiento puede echar mano de otros profesionales".
Monzón recordó el peligro que corrieron los bomberos que se internaron el pasado viernes en el túnel que conecta la antigua estación de bombeo de la Casa Roja con Los Nidillos para descartar el lugar como foco de contaminación de El Confital, que sigue cerrado al baño aunque la presencia de enterococos está por debajo de los límites recomendables. Los bomberos tuvieron que ser rescatados con sogas por otros compañeros que se quedaron fuera, porque el lodo les llegaba hasta el pecho. "Se vieron apurados, porque el lodo, el barro y toda la porquería que había allí metida les dejaron atascados y tuvieron que ser sacados por otros compañeros". Desde que se produjo dicho incidente, que no se transformó en un grave accidente, porque había otro grupo de rescate preparado en el exterior, no se han vuelto a efectuar los rastreos.
"Lo ocurrido en Los Nidillos", sostuvo Monzón, "nos reafirma en la necesidad de que hay que realizar una evaluación de riesgos de la actuación y en base a esa evaluación de riesgos establecer un procedimiento, unas instrucciones de trabajo para tener claro como abordamos la labor. Una vez fijado eso, podemos entrar en el debate sobre si es necesario que los bomberos expongan su vida en una situación como esta". Monzón recordó que la Inspección de Trabajo acaba de emitir una resolución en la que insta al Ayuntamiento a efectuar una evaluación de riesgos, tanto del puesto de trabajo como de las actuaciones que estos realizan. "Estamos molestos porque llevamos años reclamando una evaluación de los riesgos que corremos en nuestras intervenciones y eso no se ha llevado a cabo, hasta tal punto, que lo hemos denunciado en la Inspección de Trabajo", se quejó.
Otros agentes del SEIS consultados por este periódico señalaron que no es de recibo que "saquen a los bomberos de sus competencias, que encima las han limitado en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y no las han querido evaluar adecuadamente, para encomendarnos otras funciones que no son competencia de los bomberos. Si hay que hacer un rastreo y entrar ahí porque vieron entrar a una persona desaparecida, pues entramos, pero antes se deben extremar las precauciones, montar el dispositivo y el procedimiento operativo".
En los casos en los que alguien se encuentra en peligro, aclararon, "hay que ir más allá de la prevención de riesgos porque el derecho a la vida está por encima de todo y hay que hacer lo humanamente posible por salvar a esas personas, pero aquí estamos hablando de un problema medioambiental o de salud pública que puede afectar a la población, pero ahí deben actuar unos especialistas específicos".
Añadieron que en el caso de la galería de Los Nidillos -cuyas diferentes b ocas llevan rastreando desde hace un año, cuando se produjo otro episodio de contaminación en Las Canteras- , "encima de no haber ningún tipo de procedimiento de actuación ni evaluación de riesgos sacan a los bomberos de sus funciones, que son extinción de incendios y salvamento, para realizar una labor que corresponden a otros profesionales". "Tenemos la obligación de cumplir órdenes, pero estamos incurriendo en intrusismo profesional, que además pone en riesgo a los bomberos", avisaron.
Recordaron que tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil tienen equipos especializados para esas labores y destacaron la obligación de Emalsa, "como gestora del alcantarillado, de contar con personal entrenado con material específico y formación para buscar la causa. Si no se obliga a Emalsa a tener ese personal , ¿por qué se obliga a los bomberos? ¿Es que somos los tontos?"
