El conflicto de los estibadores se mantiene al menos hasta la próxima semana. La patronal, que se había reunido ayer en asamblea extraordinaria para estudiar la propuesta de las organizaciones sindicales, decidió finalmente no votar sobre la misma porque, según su despacho jurídico, de hacerlo, se podrían incurrir en "infracciones de las leyes".

En concreto, contra las leyes de defensa de la competencia y el Real Decreto Ley 8/2017, aprobado el pasado mes de mayo, por el que se da cumplimiento a la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de diciembre de 2014, que ha liberalizado el sector y que ha dejado en manos de las empresas y de los trabajadores la organización del sector.

No obstante, la Asociación Nacional de empresas estibadoras y consignatarias de buques (Anesco) volverá a presentar el martes a los trabajadores una nueva propuesta con el fin de sentarse de nuevo a la mesa de negociación. Asimismo, hizo un llamamiento para desconvocar la huelga, programada para la próxima semana en los días 19, 21 y 23.

En un comunicado, Anesco manifiesta que la ilegalidad está en tres puntos. El primero, por una discriminación a diferentes empresas en el coste retributivo, en función de si abandonan o la Sagep -Sociedad Anónima de Gestión de Estibadores-, por lo que "no es legal aceptar la propuesta de reducir las retribuciones en un 5% a determinadas compañías".

En segundo lugar, en la creación de un comité de coordinación de las Sagep, Centros Portuarios de Empleo (CPE) y empresas estibadoras, para la regulación de las actividades formativas, prácticas, traslado, subrogación, de ingresos y contratación. Y, en tercer lugar, en dejar exclusividad a las a las Sagep y CPE para la selección y contratación del personal.

"Ante esto, Anesco recuerda la imposibilidad de realizar este tipo de prácticas que pueden llegar a ser sancionadas con multas de hasta el 10% de la facturación de cada empresa interviniente y de hasta 60.000 euros a las personas directamente implicadas", asegura en el comunicado.

El ministerio de Fomento, por su parte, valoró esta semana en 110 millones de euros el impacto que la huelga de 48 horas ha ocasionado al país entre pérdidas directas e indirectas. Y alertó de que 31 buques se hubieran desviado de los puertos españoles durante las dos jornadas ante la inoperatividad que secundaron el casi 100% de los trabajadores.