La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Fiestas Fundacionales Medalla de Oro

Medalla de Oro con sabor a mar

La Cooperativa de Pescadores de San Cristóbal recibe tras casi cuatro décadas de trayectoria el reconocimiento de la cuidad en el 539 aniversario de su fundación

Medalla de Oro con sabor a mar

Hablar de tradición en Las Palmas de Gran Canaria es hacerlo de su barrio marinero. Poblado desde comienzos del siglo XVI, en San Cristóbal todavía se mantienen viva las costumbres de los antiguos marineros que intercambiaban el contenido de sus redes por alimentos del interior de la Isla. Un sector caracterizado por su espíritu solidario que, desde finales de los años 60, trabaja colectivamente por adaptar las necesidades de los nuevos profesionales a la actualidad. Una labor que camina de la mano de proyectos de futuro que ahora ponen sus miras en la inclusión de la comercialización de las capturas que, cada día, llegan a la Cooperativa de Pescadores, entidad que el próximo 23 de junio recibirá la Medalla de Oro con motivo del 539 aniversario de la fundación de la ciudad.

Hace casi cuatro décadas que arrancó la andadura de esta sociedad. Concretamente fue el 13 de agosto de 1968 cuando Aurelio Saavedra Farías la puso en marcha en la misma parroquia del barrio con el objetivo de aglutinar a los trabajadores del sector pesquero y mejorar sus condiciones de vida. Desde entonces, son muchas las etapas que ha atravesado el colectivo, algunas buenas y otras no tanto, si bien la perspectiva sigue siendo la misma. De ello se encarga actualmente Adán Santana, quien llegó a principios de año a la presidencia con ganas de insuflar aire fresco y promover cambios necesarios para posicionar el puerto del barrio en el lugar que consideran que se merece con el apoyo de las instituciones que "nunca han querido sacar de la zona la tradición marinera".

Actualmente, la asociación cuenta con 31 miembros a quienes se ofrece asesoramiento técnico y administrativo, así como se les brinda apoyo con servicios para que puedan salir a faenar. En este sentido, desde marzo la nueva directiva se puso manos a la obra en la recuperación del espacio portuario que el tiempo parece haberse detenido desde hace más de una década. Entre las acciones llevadas a cabo en este tiempo destaca la puesta en marcha de nuevo de la fábrica de hielo del barrio, sin actividad desde hace años según cuentan los pescadores. Asimismo se ha conseguido poner al servicio de los 31 socios la lonja que permanece abierta justo al lado de la sede que tiene la entidad. Por esta primera venta pasan al mediodía después de faenar los profesionales del sector para realizar el pesaje y etiquetado de las capturas.

Asimismo, desde la Cooperativa de Pescadores de San Cristóbal están a la espera de recibir el depósito fiscal de combustible para poder rellenarlo y dar uso a sus instalaciones que también, desde hace una década, han permanecido cerradas. Confían también en poder volver a utilizar el winche para varar los barcos ya que actualmente "hay que remolcarlos a la mano, como antiguamente". La renovación de la grúa es otro de los aspectos pendientes. No obstante, la gran apuesta de la sociedad es poder crear una pescadería en la lonja para que los compradores acudan a ella directamente a por el pescado fresco, sin intermediarios. "Pero para todo ello necesitamos que las instituciones nos ayuden", reclaman. Por eso piden al Ayuntamiento capitalino, al Cabildo de Gran Canaria, al Gobierno regional, así como a Puertos de Canarias, a donde pertenece el del barrio marinero, el compromiso de mejorar San Cristóbal y "ponerlo en buenas condiciones".

Adecentamiento que también pasa por el vallado de la zona ya que ahora mismo los pescadores no pueden dejar en el espacio portuario sus barcos ya que se arriesgan a que sean desmantelados. De ahí que muchos opten por el Muelle Deportivo de la ciudad, así como la zona de La Puntilla para hacerlo. "Pero todos sería más fácil si pudiéramos tenerlos aquí", aseguran desde el colectivo que está conformado también por pescadores de distintas partes de Las Canteras, como Playa Chica o la citada Puntilla, así como de La Isleta y Las Alcaravaneras.

Y es que la de San Cristóbal es la única cooperativa de la capital donde sus integrantes se enorgullecen enormemente de mantener viva la tradición isleña. "De siempre hemos vivido de la agricultura y del mar", apunta Santana para quien la Medalla de Oro es un "reconocimiento a aquellos abuelos que gracias al trueque con las personas que venían del interior de la Isla, conseguían alimentar a sus familias y ayudar a otras tantas a quienes se les daba parte de la captura porque no tenían nada que llevarse a la boca".

Antecesores

Inevitablemente, a los representantes de la directiva, entre los que también se encuentra en calidad de vicepresidente Bernardino Betancor, se les viene también a la memoria sus antecesores. Aquellos de quiénes heredaron el oficio como Carlos e l Cuco, Paco el Cabildo, Kiko Acosta, Luis Cantalla, Aurelio, Esteban, José Calisto, José el Manrijo o Juan Santana, el padre del actual presidente. A todos ellos quieren dedicarles el "importante premio" con el que esperan seguir luchando por preservar la identidad del barrio marinero.

Compartir el artículo

stats