La bandera roja ondea de nuevo en El Confital, y no por peligro de olas sino por una nueva contaminación fecal en el agua. La playa vuelve a estar cerrado al baño después de 22 días abierta al público, tras determinase al mediodía de ayer que la última analítica, realizada por la Dirección de Salud de Gran Canaria el pasado miércoles, día 5, contenía un nivel de bacterias por encima del límite establecido como óptimo. La concejalía de Ciudad de Mar señala que el último examen del agua de la playa indicaban "una concentración de esta bacteria de 1.100 unidades formadoras de colonias de enterococos". De ahí que se tomara está determinación.

La cifra es muy superior a la que se detectó el 26 de abril, cuando se cerró la playa por primera vez después de que las muestras obtenidas por el Área de Salud Pública del Gobierno de Canarias registraran 440 unidades de entereococos, un nivel muy superior a las 200 unidades establecidas por la administración regional por cada 100 mililitros de agua.

El Ayuntamiento subraya que el estudio geofísico que se está realizando en la zona desde el pasado 29 de junio coincide con la hipótesis de que el origen de la contaminación que sufre la playa podría llegar "a través del subsuelo" hacia el mar.

"Los últimos datos indican una fuente activa, lo cual puede explicar esta subida inusual de enterococos, debido a un filtrado difuso que llega al mar a través de fisuras del propio terreno y aflora en mayor o menor cantidad en función de la altura de la marea. Todo ello complica su localización, según los técnicos", se subraya en la nota después de que los geofísicos de la empresa Aplicaciones Geofísicas Insulares hayan analizado tres zonas. El estudio no está finalizado.

Desde el Ayuntamiento se indica que los servicios municipales de Ciudad de Mar, Seguridad, Aguas y Patrimonio, además de Emalsa, la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y la empresa AT Hidrotecnia han realizado desde el primer aviso por contaminación fecal más de una decena de acciones continuadas. "Entre ellas, se ha abierto tres tramos distintos de tuberías antiguas de El Confital, se han realizado inmersiones submarinas, analíticas de agua intensivas y periódicas en toda la costa, citometrías en la costa, analíticas en mar abierto, inspección de galerías, identificadores con fluorecina y rodamina, estudio geofísico, prueba de estanqueidad en la caseta de Cruz Roja, limpieza de lodos en la Casa Roja [una estación de bombeo de suministro eléctrico en desuso situada al borde del mar en la continuación del paseo de Las Canteras] y su posterior conexión a la red de saneamiento y la inspección de la galería de Los Nidillos, entre otros" para detectar el foco bacteriano. Pero aún no hay nada concreto.

Las primeras hipótesis recayeron en la galería de Los Nidillos y en la Casa Roja, que ya habían provocado alguna contaminación. Precisamente, la inspección a esta última por parte de Bomberos provocó un rifirrafe entre los trabajadores y el Ayuntamiento al denunciar los sindicatos el peligro que estos corrieron la inspección en la galería que conecta ambas zonas, llena de lodos, el 9 de junio.

La playa fue abierta el 16 de junio después de que el Ayuntamiento solicitase a Salud Pública del Gobierno de Canarias su reapertura tras 51 días cerrada porque los niveles de bacterias fecales habían bajado. Salud Pública levantó la prohibición, aunque recomendó no bañarse en ella.

La ciudad, destino familiar con sello

  • Las Palmas de Gran Canaria ha recibido el Sello de Turismo Familiar. La distinción, otorgada por la Federación Española de Familias Numerosas (FEFN), reconoce que la capital cuenta con una oferta de establecimientos alojativos, de restauración y de ocio idóneos para las familias. La entrega de este sello la hizo el propio presidente de la ´Asociación + de 2´ de Familias Numerosas de Canarias, Alberto Rodríguez, al concejal de Turismo, Pedro Quevedo, este viernes en la Casa del Turismo. Para recibir esta distinción la ciudad ha pasado por un estudio exhaustivo, en el que se han medido diferentes aspectos y necesidades que tienen las parejas que viajan con niños en la ciudad. Es la primera vez que un destino de Canarias obtiene esta certificación. En la Península ocho ciudades y dos destinos de naturaleza ostentan esta marca, ademas de más de un centenar de establecimientos y entidades turísticas. El Sello de Turismo Familiar permite a las parejas con niños seleccionar el destino con la garantía de que van a encontrar establecimientos y servicios adaptados a sus características.