El policía local acusado de retirar multas a cambio de 240 euros en el barrio de Guanarteme aseguró ayer no recordar nada sobre los hechos que ocurrieron entre 2014 y 2015. El procesado, Juan Miguel Cabrera López, quien supuestamente abusó de su cargo para no tramitar las sanciones a cuatro vecinos, achacó lo sucedido a su adicción a las drogas. Un problema que durante su declaración confesó tener desde 1999 y por el que la defensa solicita la absolución de la pena de cinco años de cárcel que pide la Fiscalía de Las Palmas por un presunto delito de cohecho.

El juez Nicolás Acosta fue el encargado de presidir la primera vista oral que tuvo lugar en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, donde el juicio se prolongará hasta el jueves con la presencia de un jurado popular compuesto por 11 personas. Ellos, según el fiscal Pedro Gimeno, serán los encargados de dar un veredicto que de ser favorable a su acusación, podría aumentar la estancia en prisión de Cabrera que, actualmente, se encuentra en el Salto del Negro por otra causa.