Varios funcionarios del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se encuentran peinando las diferentes webs con ofertas de alquiler vacacional en busca de viviendo que no hayan obtenido una licencia por parte del Cabildo Insular. De esta manera Urbanismo está localizando la oferta ilegal que se publicita en la capital. Una medida para "combatir" los arrendamientos turísticos sin licencia, según Javier Doreste, concejal del área.

Una vez realizada la criba, se les mandará un requerimiento, instándoles a resolver su situación. Igualmente, esta selección servirá para ver si sus dueños han realizado el cambio de uso correspondiente de la propiedad: de residencial a comercial. "Queremos ver si todos han hecho el cambio de uso de explotación, de no ser así requerirles que lo hagan, de tal forma que paguen las tasas de basura, los impuestos en base a su nueva actividad y ver si cumplen las medidas de seguridad", señaló Doreste.

El Consistorio mantuvo ayer una reunión con representantes de la Asociación de Hoteles y Establecimientos Extrahoteleros de Las Palmas de Gran Canaria (Ahelpa) para abordar la situación que ha creado la proliferación del alquiler vacacional en varias zonas de la capital. Según la organización el auge de esta práctica supone una competencia desleal, pues no concurren en igualdad de condiciones en el mercado.

Asimismo, esta oferta turística ha provocado que casi desaparezcan los pisos en alquiler convencional en los barrios de Guanarteme, La Isleta y el entorno de Las Canteras, un hecho que preocupa enormemente al Consistorio. "Lo que no puede ser es que un estudiante de otra Isla a principios de curso no encuentre piso, que venga un médico destinado y tampoco; volveremos a los tiempos de antes con la casa del médico, la del maestro", aseveró Doreste.

Compatibilidad urbanística

Desde el Consistorio están trabajando para ver cómo pueden obligar al Cabildo Insular a pedir un informe de compatibilidad urbanística antes de conceder una licencia. "Queremos que el Gobierno Autónomo modifique su Ley para obligar a los Cabildos a pedir ese informe de compatibilidad urbanística, igual que se hace con otros negocios", aseguró el edil. "Nos pondremos en marcha como cualquier hotel o bar que pide un permiso de apertura", continuó.

De esta manera, el Consistorio intentará garantizar las medidas de seguridad pertinentes. Igualmente, Doreste ha expresado que se aplicará "con rigor" el Plan General de Ordenación, en el que se especifica que no puede haber actividades comerciales por encima de un espacio residencial, además de tener un acceso por separado para ambas situaciones. "Hemos realizado una nueva normativa de edificabilidad donde hemos mantenido eso, a pesar de la oposición del PP, quienes consideran que deberíamos permitir el uso comercial en plantas superiores", señaló el concejal de Podemos.

Por su parte, Orlando Bonilla, presidente de Ahelpa, apuntó que su principal inquietud reside entorno a la competencia desleal que supone el alquiler vacacional. "Nos preocupan los llamados ilegales, porque incluso para los que si lo supone competencia desleal, queremos que esta situación se combata de alguna manera desde cualquier organismo que tenga la potestad para acometer este tipo de situación", resaltó Bonilla. "Cumplimos con una serie de requisitos en las leyes de turismo y tenemos una fiscalización concreta, nos preocupa que no haya igualdad de condiciones en este sentido", continuó.

Juan Francisco de la Vega, en representación de los extrahoteleros resaltó, el daño que les está haciendo esta práctica. "Para tener mis apartamentos abiertos necesito una licencia de actividad, pero se han abierto una serie de inmuebles que son enteros de recintos vacacional, hacen el mismo trabajo que yo, todo igual, pero ellos no necesitan licencias de actividad, ni se hacen inspecciones de ningún tipo, ni cumplen normativas de incendios, ni parte de entrada de viajeros", indicó De la Vega. Cabe resaltar que la oferta alojativa extrahotelera en la capital grancanaria se ha reducido a la mínima expresión.

Asimismo, Ahelpa propuso al Consistorio iniciar una campaña desde el área de Turismo para enseñarles a los dueños de pisos en régimen de alquiler vacacional que legalizarlos es algo "sencillo".