Un grupo de profesionales y artistas inauguraron ayer en el centro cultural Pepe Dámaso, de La Isleta, la exposición de fotografías y textos Traspasar la Valla, en la que se reivindica, a través de una mirada artística, la recuperación para los ciudadanos de la zona militar del paraje protegido de El Confital. La propuesta refleja la anomalía que supone que este espacio de La Isleta, calificado como paisaje protegido, continúe siendo un misterio para buena parte de los ciudadanos, debido a la valla que impide el paso y que sólo algunos se atreven a cruzar para disfrutar de sus acantilados y de su costa.
Esta mirada poética sobre la zona más salvaje del litoral capitalino ha sido trazada por Marta Vega, Luisa Urréjola, J. C. Falcón Lemes y Luis González, que aportan su particular visión fotográfica del paraje, mientras que Elsa Guerra y Sonia Mauricio se encargan de unos textos, en los que intentan concienciar sobre el valor de este paisaje. A juicio de la arquitecta Elsa Guerra, es preciso adaptar El Confital a las "condiciones de un área natural protegida, lo que significa explotar todas sus potencialidades como espacio libre inalterado en lo relativo a: su fondo marino, su mar, sus mareas, su viento, su borde litoral, su topografía, su geología, su flora, su fauna y su paisaje. La Isleta se podría convertir en un auténtico laboratorio de la geografía de Canarias, así como servir de espacio libre para uso y disfrute de los ciudadanos."
El concejal del distrito Isleta-Puerto-Canteras, Sergio Millares, considera que la propuesta artística es "una oportunidad para pensar qué ciudad queremos y cómo recuperamos y encajamos en ella este espacio, de tal forma que permita a la ciudadanía un uso que sirva como descompresión de la vida urbana".
"Ha llegado el momento pues", considera Millares en el catálogo de la exposición, "de traspasar la valla, de avanzar sobre las oxidadas espinas que como frontera limitan y cortan nuestra ciudad. Será un camino difícil en el que esperamos contar con el apoyo de la ciudadanía y en el que sabemos que nos encontraremos muchas resistencias pero que augura un final venturoso".
Millares se mostró ayer partidario de negociar con el Ministerio de Defensa una cesión, a través de un convenio, de la zona costera de El Confital, que "los militares no utilizan para nada, y lograr que la ciudadanía entre y ocupe este espacio". El edil se refirió al cerrojazo impuesto por los militares a las visitas guiadas de varias asociaciones a la parte alta de El Confital. "Se está negociando otra vez para la reanudación de esas visitas guiadas, pero me parece intolerable que se hayan suspendido", sostuvo. "La presencia del Ejército", añadió, "está sobredimensionada en esta ciudad y tenemos que negociar como se ha hecho en otras ciudades para que no ocupen tanto sitio y le hagan un hueco a la ciudad ya la ciudadanía que lo demanda. Nosotros no queremos meternos en las necesidades del Ministerio de Defensa, pero desde el punto de vista ciudadano, de la ciudad, creo que hay que abordar seriamente la recuperación del espacio de La Isleta en su conjunto".
